Por la emisión de ceniza provocada por una explosión del volcán Tungurahua el 28 de noviembre pasado, la Dirección de Aviación Civil (DAC) solicitó a las aerolíneas que operan las rutas Cuenca-Quito, Loja – Quito y Lima – Quito volar a más de 36 mil pies de altura, para no ser afectadas por el material volcánico, así lo explicó Fernando Guerrero, director de la entidad.
Guerrero manifestó que por lo general la ceniza volcánica está a 34 mil pies de altura, por lo que solicitó que los aviones que vuelan las rutas del Sur del país lo hagan a los 36 mil pies. “Las aeronaves que no pueden estar a 36 mil pies por sus especificaciones operacionales, lo que hemos pedido es que tengan un pequeño desvío por la Amazonia”.
Esta medida se mantendrá hasta que ya no exista presencia de ceniza en el espacio aéreo. “Hoy no ha existido presencia de ceniza volcánica, no hubo erupciones, ya poco a poco la ceniza volcánica va cediendo, y si ya no tenemos más (ceniza), todo vuelve a la normalidad”, dijo Guerrero.
Con respecto a Guayaquil, el Director dijo que hubo un poco de ceniza volcánica que se dirigía a esa ciudad, “pero no tuvimos la necesidad de cerrar la ruta Quito-Guayaquil; Guayaquil- Quito, que es la ruta con mayor presencia. No tuvimos que hacer ningún desvío, ningún cierre de operaciones”