Científicos de Estados Unidos desarrollaron una nueva técnica de tomografía que tiene una resolución 10 veces mayor que la disponible actualmente y que permite observar los detalles de las estructuras celulares de las arterias, para diagnosticar tempranamente enfermedades cardíacas.
Los investigadores del Centro Wellman de Fotomedicina del Hospital General de Massachusetts crearon una versión micrométrica de la tomografía de coherencia óptica (OCT), que permite penetrar el tejido con imágenes para ver lo que ocurre a nivel celular.
El desarrollo científico publicado en la revista Nature Medicine y que reproduce la BBC, permitirá mejorar el entendimiento, diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de las arterias coronarias (EAC).
Esta enfermedad es el trastorno del corazón más común y es la principal causa de muerte tanto de hombres como en mujeres.
La EAC ocurre cuando las arterias coronarias, encargadas de suministrar sangre al músculo cardíaco se endurecen y se estrechan obstruyendo el flujo del plasma.
Cuando se sospecha que un individuo presenta EAC, las pruebas estándar de diagnóstico son los escáneres de tomografía computarizada para visualizar el flujo arterial y la actividad del corazón.
Pero el científico Gary Tearney destacó que “con esta nueva técnica de alto nivel de resolución, se abre la posibilidad futura de observar las características microscópicas en pacientes humanos, lo cual tiene implicaciones para mejorar el entendimiento, diagnóstico y control terapéutico”.
La nueva tomografía utiliza una fuente de luz de infrarrojo cercano para crear imágenes detalladas de las superficies internas de los vasos sanguíneos, con una resolución equivalente a la de un microscopio de baja potencia.
Aunque con esa resolución se pueden identificar placas arteriales que pueden romperse, hasta ahora no habían podido obtenerse imágenes claras de estructuras menores de 10 micrómetros.
Por eso, con ese nuevo tipo de lentes y componentes más avanzados se obtendrán imágenes de una millonésima de un metro de la arteria, lo cual permitirá revelar la información más detallada de tejidos en tres dimensiones.
De esa manera se podrán observar células individuales arteriales e inflamatorias, incluidas las características que pueden identificar placas vulnerables dentro de las muestras de arteria coronaria.