La Policía Nacional de España ha arrestado a un grupo de siete atracadores -todos de origen latinoamericano- liderado por dos hermanos y que actuaba en la región de Madrid, informaron hoy fuentes policiales.
A los atracadores, procedentes de Ecuador, Bolivia y Cuba, se les intervenidas cinco armas de fuego con las que cometían sus golpes y robaban en comercios y domicilios particulares.
Para evitar hacer mención expresa a sus actividades, durante sus conversaciones los miembros del grupo usaban un código especial con expresiones como hacer «reformas en pisos», que significaba en realidad asaltar viviendas, o utilizar «pintura de buena calidad», que hacía referencia al uso de armas de fuego.
Se trataba de una banda muy organizada y meticulosa a la hora de preparar y planificar los hechos delictivos, según las fuentes.
Antes de actuar, los delincuentes se dirigían a las inmediaciones de los inmuebles seleccionados para comprobar los elementos de seguridad, tales como cámaras de vídeo vigilancia, puertas de acceso a zonas comunes o moradores que vivieran en el domicilio.
Si veían que podía existir algún tipo de riesgo, abortaban su intento y empezaban la búsqueda de un nuevo objetivo.
El grupo mantenía una alta actividad delictiva, saliendo a «trabajar» a primera hora de la mañana y regresando a última hora de la tarde a sus domicilios, donde hacían una vida normal.