En el marco de la V Cumbre del Poder Judicial de la Unasur, que se desarrolla en Cuenca, se firmó un convenio interinstitucional entre Ecuador y Perú para el fortalecimiento de la justicia entre los dos países.
Las dos naciones se comprometen a trabajar en conjunto, en cumplimiento de sus funciones institucionales y con sujeción a sus respectivas competencias y autonomías. También se establece la realización de actividades jurídicas conjuntas. Así como compartir experiencias de investigación de interés común en temas de impartición de justicia, desempeño de funciones de magistrados y jueces, ética judicial y en temas de gestiones administrativas-judiciales y tecnológicas.
El presidente de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador, José Vicente Troya, dijo que este convenio bilateral servirá para intercambiar experiencias para el mejoramiento de la justicia y todos sus servicios.
Javier Villa Stein, presidente de la Corte Suprema de Justicia de Perú, manifestó que con la suscripción de este convenio se genera una línea de apertura de esfuerzos para optimizar los servicios de justicia entre los dos países. “Tenemos que aprender del sistema de justicia de Ecuador”, sentenció.
Mientras tanto, José Serrano, ministro de Justicia y Derechos Humanos de Ecuador, señaló que el intercambio de conocimientos y experiencias servirá para la vigorización del sistema judicial de los dos países. Uno de sus resultados será la agilización de los procesos judiciales que mantienen compatriotas privados de la libertad en Perú y viceversa
De esa forma, prosigue, «cada uno de los actores podrá aportar su contribución, con total transparencia, a la construcción de un proyecto de renovación».
«A partir de esas conclusiones, el Gobierno emprenderá una reflexión más general sobre la gobernanza de las federaciones deportivas», concluye el comunicado presidencial.
La selección francesa, contundentemente eliminada en la fase de grupos del Mundial de Sudáfrica, ha protagonizado el mayor escándalo de lo que va de torneo, con un pésimo balance deportivo, insultos entre jugadores y cuerpo técnico y motines de los internacionales, lo que ha propiciado un aluvión de críticas de público, medios, políticos y patrocinadores.