Miembros de la Asociación Ecuatoriana de Origami (AEO) han elaborado con 90 metros de papel reciclado y su habilidad manual como únicos elementos la «figura de papel más grande de Latinoamérica»: un esqueleto de tiranosaurio rex de tamaño natural.
Así lo indicó hoy Santiago Ponce, secretario de la AEO, al informar de la participación ecuatoriana en el II Congreso Latinoamericano de Origami que se celebrará en Chile la próxima semana.
Además de presentar figuras de osos de anteojos, iguanas terrestres, caimanes, insectos y armadillos hechas en papel y de unos 10 ó 15 centímetros de alto, los ecuatorianos participantes en ese congreso -Ponce y otros cuatro integrantes de la AEO- contarán cómo elaboraron el tiranosaurio.
La figura fue donada a una biblioteca juvenil situada en un céntrico parque de Quito y allí se exhibe como «una marioneta» colgada de techo con hilos y alambre.
Quince personas trabajaron cinco meses en la elaboración del tiranosaurio rex, que está formado por 21 piezas.
Hay una inmensa figura en Estados Unidos hecha en papel, pero en ella se utilizó «también maquinaria», en cambio «esta figura fue completamente hecha a mano y en este género de doblado es la más grande en Latinoamérica», aseguró Ponce.
Ponce, que está vinculado a la papiroflexia desde hace unos once años, considera que este arte de origen japonés también llamado origami, en el que no se usan tijeras ni pegamento o grapas, únicamente el papel y las manos, es una «terapia súper desestresante» y una «excelente herramienta de socialización».
Al Congreso Latinoamericano de Origami, que se desarrollará entre el 25 y 27 de agosto en Santiago de Chile, asistirán diez delegaciones de América del Norte, del Sur y El Caribe.
Las figuras que presentarán los ecuatorianos están todas inspiradas en la fauna del país.