Ecuador ha vivido importantes cambios en el ámbito de la justicia a partir del 2007. La restructuración del sistema judicial, impulsado por referéndum popular en mayo del 2011, los cambios en el sistema de rehabilitación social y el desarrollo del proyecto de Código Integral Penal, son tres de sus principales hitos.
En septiembre del 2011, el Consejo de la Judicatura de Transición (CJT), organismo encargado de llevar adelante la transformación del sistema judicial ecuatoriano, inició un inventario para saber cuantas causas se encontraban represadas. El organismo, luego de un trabajo de meses, registró un total de 3’000.302 causas, muchas de las cuales estuvieron estancadas durante décadas y sus expedientes almacenados de forma antitécnica. Incluso había procesos a punto de prescribir, según su titular Paulo Rodríguez, y se demostró el olvido en el que se encontraba el sistema.
Desde el inicio de su gestión, el CJT empezó con actividades históricas, tales como la evaluación de aproximadamente 7.000 servidores judiciales, concursos públicos de méritos, oposición e impugnación ciudadana para elegir a los jueces de la Corte Nacional de Justicia, así como otros magistrados en diferentes áreas. Además, la construcción de nuevas judicaturas e inversión en infraestructura tecnológica, entre otros.
Cada uno de esto cambios tiende a ser bien visto por la ciudadanía, principalmente por los indicios de mejoramiento de la atención en juzgados, la rapidez en el acceso a la justicia, la agilidad de trámites, la extensión de los horarios de trabajo de los judiciales, así como también la rebaja en tasas notariales.
La prohibición emitida por la judicatura de cerrar los juzgados al medio día para que los ciudadanos puedan realizar sus trámites, facilitó a Estefanía Hidalgo solicitar la clave para retirar la pensión alimenticia de su hijo, ella asegura que la hora del almuerzo que le da su empresa, es el único momento en el día para poder realizar tramites como este.
Sin embargo, no en todas las oficinas administrativas ocurre esto; por ello resaltó la importancia de este hecho que al parecer es simple, pero que ha facilitado las gestiones de los usuarios.
Aníbal Reyes trabaja en el área del archivo del Palacio de Justicia de Quito, él comentó que durante años se encargó de archivar cientos de expedientes en un espacio inapropiado, atados con piolas. Ahora han recibido una capacitación para manejar la informática y de esta manera tener los archivos almacenados electrónicamente.
Según el CJT, en los 18 meses de trabajo previsto para el cambio del sistema judicial, está programada la ejecución de 84 obras de infraestructura civil, para la atención ciudadana, además, la incorporación de la plataforma tecnológica Justicia 2.0, cuyo objetivo es avanzar hacia una “justicia cero papeles”.