Una «relativa calma» se observa este lunes en torno al volcán Tungurahua tras la explosión de gran intensidad del domingo, que formó un inmenso hongo de gases sobre su cráter, informó el Instituto Geofísico.
«La situación del volcán es de relativa calma y estamos con expectativa de ver qué es lo que pasa en las próximas horas o en los próximos días», dijo el técnico Mario Ruiz, del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional.
El experto explicó que en la mañana de hoy no se han observado explosiones grandes.
«Creemos que es importante mantener un período de prudencia, de expectativa porque el volcán tiene un conducto abierto en este momento», dijo al comentar que, si hubiese «un nuevo ingreso de magma, puede fácilmente salir a la superficie»
Por eso Ruiz cree que se debe continuar con las actividades de monitoreo y que las autoridades y la población estén «atentas a cualquier cambio en la actividad del volcán».
La ceniza que emanó ayer el Tungurahua afectó a las provincias de Tungurahua, Chimborazo, Bolívar, Los Ríos y Manabí, dijo el experto.
La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) declaró el domingo en «alerta naranja», de precaución, la zona del volcán, ante un posible aumento de la actividad del coloso.
La medida de prevención incide en las provincias de Tungurahua y Chimborazo, que tiene al coloso como límite geográfico, donde se han activado los planes de contingencia previstos para este tipo de situaciones.