Firmas petroleras afectadas por la moratoria de seis meses en la perforación impuesta por Estados Unidos, buscan que la Justicia revierta la decisión, en tanto documentos de BP revelan que el vertido de crudo en el Golfo de México podría ser de 100 000 barriles diarios.
Paralelamente, la petrolera británica BP dijo que ya gastó 2 000 millones de dólares tanto en limpieza como en el pago de daños por el derrame, la peor catástrofe ambiental en la historia de Estados Unidos.
El juez federal Martin Feldman, que estudia el reclamo de 32 compañías de servicios petroleros de levantar la moratoria, dijo que emitirá su fallo a más tardar el miércoles.
Tanto los trabajadores como los ejecutivos del sector instalados en la costa sur estadounidense criticaron la decisión del gobierno de Barack Obama debido a que -argumentan- expulsa el negocio fuera del Golfo de México y les priva de su medio de vida.
Hornbeck Offshore Services, la primera empresa en plantear el caso, señaló que la moratoria -que obligó a detener la perforación en 33 pozos ya existentes en el Golfo- es “arbitraria, caprichosa, un abuso discrecional” e inconsistente con las regulaciones de la industria.