La afectación a la salud y al rendimiento estudiantil, crisis financieras familiares y el riesgo de lavado activos son algunos de los problemas que están detrás de los casinos y las salas de juego.
En el país existen 17.773 establecimientos turísticos registrados en el Ministerio de Turismo, de los cuales 55 son casinos, salas de juegos y bingo-mecánicos, informó Luis Falconí, viceministro de Turismo quien explicó que hay cientos que no se ajustan a las normativas vigentes actuales.
Estos sitios de diversión han generado que en Ecuador el 12,7% de la población padezca de ludopatía (adicción al juego), mientras que un 46% estaba en riesgo de caer en ella, según un informe del Ministerio de Salud Pública que señala que el 70% de los ‘ludopatas’ juega todas las semanas; el 29% , casi todos los días; el 64% vuelve cuando pierde con la intención de recuperar lo perdido y el 19,8% apuesta con dinero prestado.
De acuerdo con el estudio, el 15,2% de encuestados acepta tener problemas con el juego por no tener control sobre el mismo.
Asimismo, un informe de la División de Orientación y Bienestar Estudiantil del Ministerio de Educación ecuatoriano, la ludopatía genera afectaciones a nivel psicológico, desadaptación escolar, ausentismo, bajo rendimiento, problemas de aprendizaje, baja capacidad de análisis crítico.
Para Juan Carlos Egas, sociólogo, esto es una realidad que no se puede negar, ya que los jóvenes por su edad, se ven tentados de entrar a los lugares donde existen juegos de azar, por lo que afecta a la educación. Según Egas estas salas deben estar lejos de los lugares educativos, y los maestros deben reforzar la misma.
En los casinos también se generan problema del lavado de activos porque potencialmente son utilizados de dos maneras: algunos propietarios se instalan para estos fines y otros son usados por los clientes a través de compras de fichas y premios, además existe intercambio de billetes, señala un Informe de la Unidad de Inteligencia Financiera del Ecuador.
Falconí informó que en estos establecimientos emplean a 2.091 personas de las cuales 1.678 trabajan en casinos y 413 en bingos. Mientras, el número de personas que labora en los establecimientos no registrados asciende a 1.492.
De ahí que desmintió las publicaciones que afirman que cerca de 40.000 personas se quedarán sin empleo por el cierre de los casinos, según plantea la Consulta Popular en su pregunta siete: ¿Está usted de acuerdo que en el país se prohíban los negocios dedicados a juegos de azar, tales como casinos y salas de juego?
Miguel Mora, presidente de la Asociación Nacional de Salas de Juego y Casinos, dijo que con esta pregunta se perderán plazas de trabajo, por lo que no están de acuerdo con la pregunta.Dijo que esta actividad también atrae el turismo ya que muchos de las personas que visitan el país acuden a los casinos o salas de juego para divertirse y dejar divisas.
El viceministro desestimó esta afirmación y explicó que según el Estudio de Percepciones, Opiniones y Prácticas sobre Casinos y Salas de Juego en Ecuador, realizado por la encuestadora SP Investigaciones y Estudios, los clientes de los casinos casi en su totalidad son personas nacionales.
Este estudio también señaló que los clientes de las salas de juego que no cuentan con el permiso de turismo fueron en su totalidad personas nacionales. Además mostró que a nivel nacional, el 43% de las personas cree que Ecuador no es conocido en otros países por los casinos y salas de juego y el 28% cree que se conoce poco. Mientras tanto, un 2% respondió que se conoce mucho, el 12% algo y el 15% no dio una respuesta.
Las salas de juego, las máquinas tragamonedas también resultan un problema. El viceministro informó que en el país existen aproximadamente 12.000 salas no registradas y 3097 máquinas tragamonedas registradas.
Falconí sentenció que se realizan operativos, pero muchas veces los amparos constitucionales les devuelven a los dueños de las salas de juego las máquinas para su uso.