Fortalecer las capacidades de las inmigrantes ecuatorianas y sus familias en España para hacer frente a la violencia machista y acceder al sistema de protección y de justicia son los objetivos de un proyecto presentado hoy en Madrid.
La Embajada de Ecuador en España y la Fundación Repsol han firmado un acuerdo de colaboración para desarrollar el programa, que atenderá a cerca de mil inmigrantes residentes en la región de Madrid, con especial énfasis en los grupos en situación vulnerable.
Se trata de llegar a un colectivo, el de las mujeres inmigrantes y sus familias, «especialmente vulnerable», destacó la secretaria de Estado de Igualdad de España, Bibiana Aído, ya sea porque tienen «mayor dependencia» de sus agresores como porque carecen de redes sociales o familiares de apoyo y de información sobre los recursos a los que pueden acudir.
La población extranjera en España supone un 11,3 % del total, pero su proporción en el número de víctimas y agresores en casos de violencia machista «está sobrerrepresentada», añadió Aído, ya que, desde 2003 suponen el 30 %, con años «especialmente difíciles» como 2008, cuando ascendió al 44 %.
Desde 2003, el número total de víctimas de violencia machista en España asciende a 573, de las que 119 fueron extranjeras y 21, ecuatorianas, según datos de la Secretaria de Estado de Igualdad.
Sólo en 2010, cinco mujeres ecuatorianas fueron asesinadas por sus parejas o exparejas y en lo que llevamos de 2011, dos.
«Las víctimas tienen que saber que las leyes las protegen, que sabemos de sus especiales circunstancias y que hemos hecho los cambios legales necesarios para protegerlas», dijo Aído, cuyo departamento es el encargado de formar a quienes impartirán los talleres en los colectivos de inmigrantes.
El embajador de Ecuador en España, Galo Chiriboga, explicó que, con el proyecto, se busca romper «los patrones que reproducen» la cultura machista y violenta, fortalecer las capacidades de las mujeres y sus hijos «para modificar sus valores familiares», así como ofrecerles «información sobre la prevención» y sobre el acceso a los sistemas de protección y de justicia español.
Asimismo, se promoverá «la lucha contra el alcoholismo y todas aquellas prácticas sociales que crean condiciones de violencia, discriminación o relaciones inequitativas entre hombres y mujeres», añadió el embajador, que destacó que el programa está abierto a otros colectivos de inmigrantes.