El petróleo derramado por la rotura del Sistema Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) hace 19 días no llegó a territorio peruano y brasileño. Así lo señala un informe de la comisión interinstitucional que se conformó para evaluar los efectos ocasionados por el citado incidente que afectó al río Napo.
Los miembros de la comisión sobrevolaron los ríos Napo hasta la zona fronteriza, Curaray en Perú, y llegaron hasta Tabatinga (Brasil).
Según ellos, «a partir de la observación aérea se puede descartar contaminación de crudo en territorio peruano y brasileño». En el recorrido tampoco se vieron aguas oleosas o vegetación pigmentada con petróleo. Durante los cinco días que duró el recorrido se tomaron seis muestras de agua que serán analizadas en laboratorios.
La observación estuvo a cargo de personal del Ministerio del Ambiente, Fiscalía de Sucumbíos, Empresa Pública, Petroecuador y expertos de la empresa Oil Spill Response, en un recorrido de 531 millas.
El objetivo del viaje fue evaluar la magnitud del derrame de crudo y su extensión, por las denuncias de que la mancha de petróleo había llegado a Perú e incluso a Brasil.