La Federación Ecuatoriana de Indígenas (FEI) se reunió hoy con el Jefe de Estado y mostró su respaldo a la propuesta de consulta popular a realizarse el próximo 7 de mayo. Más de mil personas se concentraron en la Plaza Grande mientras los dirigentes dialogaban con el presidente Rafael Correa, a quien le presentaron su inquietud sobre la repartición de tierras en varias zonas del país.
El presidente ecuatoriano explicó que la consulta también servirá para legalizar los terrenos ya que una de las repercusiones de la injusticia en el país también se refleja en la entrega de tierras. “Dar tierra a nuestros campesinos se demora por empresarios corruptos que evaden la ley”, manifestó.
Entre los dirigentes, además de indígenas, se destacó la población montubia y afrodescendiente. José Agualsaca, líder de la FEI, dijo que su organización, una de las más antiguas del país, estudia cada una de las preguntas del plebiscito. “Tenemos que poner en nuestro lenguaje para que nuestra gente entienda, y eso estamos haciendo”, señaló.
Por su parte, Correa reconoció la presencia indígena en Carondelet y manifestó que allí “se encuentra el verdadero pueblo indígena, los verdaderos líderes”. La FEI tiene vida desde 1926 y de ella han sido líderes mujeres como Dolores Calcuango y Tránsito Amaguaña.
En su intervención, el mandatario sostuvo que la consulta aspira a mejorar la seguridad y la justicia, lo que los asistentes aprobaron con múltiples aplausos.
Críticó, además, lo que denominó “fanesca política”. “Ahora la Junta Cívica de Guayaquil va de la mano de Pachakutik… La extrema derecha con el MPD”.
Asimismo, señaló que la multitudinaria concentración es una muestra de “con quién está el pueblo indígena” e insistió que los que se están a favor del No, tampoco tienen propuestas. “Por mala que sea la Consulta, ¿es que no hay una sola pregunta que valga la pena (para los opositores)?, cuestionó.
Ofreció que con la aprobación de la Consulta se evitará la explotación laboral, los excesos de la prensa y la inseguridad.