El acuerdo comercial entre China y Ecuador será oficialmente firmado el miércoles 10 de mayo en Quito, en el hotel Marriott. El evento se dividirá en tres momentos clave.
El primer momento, de 19:30 a 20:00, consistirá en una reunión protocolar para la firma virtual del acuerdo, según lo programado en la agenda del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca.
A partir de las 20:00, se llevará a cabo una rueda de prensa en la que participarán los ministros de Producción, Julio José Prado; de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gustavo Manrique; y el Viceministro de Comercio Exterior, Daniel Legarda.
Finalmente, a partir de las 20:30, se realizará el Conversatorio “Oportunidades y Desafíos del Acuerdo Comercial Ecuador-China”, en el que el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, también estará presente.
China es el principal destino de las exportaciones ecuatorianas no petroleras. Durante todo el año 2022, las ventas a China alcanzaron los $4.343 millones, lo que representó un aumento del 15% en volumen y del 60% en valor. En lo que va de este año, entre enero y febrero, se han exportado productos por un valor de $760 millones, principalmente camarones, lo cual supone un incremento del 11% en comparación al mismo periodo del año anterior, según datos de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor).
La firma de este acuerdo pone fin a un proceso de negociación que duró diez meses, con cuatro rondas de discusiones que culminaron en enero pasado con el exitoso cierre de las mesas técnicas.
Después de la firma, el documento será sometido a revisión por parte de la Corte Constitucional y luego será enviado a la Asamblea Nacional para su ratificación o rechazo.
La entrada en vigencia del acuerdo dependerá de su ratificación en la Asamblea. El Ministro de Producción, Julio José Prado, destacó la importancia de que las demás funciones del Estado actúen con agilidad una vez que el acuerdo sea ratificado.
Es importante destacar que el acuerdo excluye alrededor de 800 productos considerados sensibles, con el objetivo de proteger la industria nacional. Entre estos, se encuentran más de 400 partidas relacionadas con el sector textil, que han sido preservadas para evitar un impacto directo de la competencia con China, que aplica aranceles cero. Además, se han protegido los sectores de la metalmecánica, acero, cerámica e industria blanca.
En resumen, la firma del acuerdo marca el final de un proceso de negociación. La entrada en vigencia del acuerdo dependerá de su ratificación en la Asamblea Nacional. El acuerdo protege a la industria nacional al excluir ciertos productos sensibles, como los relacionados con el sector textil.