La fiscal Alexandra Bravo realizaba investigaciones respecto al asesinato de dos personas, ocurrido en la vía Manta-Puerto Cayo, cuando fue recibida con disparos dentro de una plantación de tagua ubicada en el sector San Jacinto de la ciudadela 15 de Abril, en Manta.
El atentado dejó como resultado la muerte del presunto atacante Jaime Gilberto García Macías, de 33 años. Además fue herido de gravedad el agente Vidal Zambrano Arellano, quien custodia a la funcionaria.
El gendarme recibió un disparo en la cabeza y se encuentra con pronóstico reservado en el hospital del IESS de esa localidad.
Vidal Zambrano fue herido dentro de la camioneta donde iba la fiscal Bravo y, al parecer, recibió el balazo en el momento que trataba de poner a la funcionaria a buen recaudo.
Alfonso Vélez, otro de los fiscales que llegó como apoyo, tras el incidente, se mostró sorprendido por el hecho. Según manifestó, inexplicablemente, su compañera y los gendarmes fueron recibidos con disparos por García Macías, pero pudieron salir con vida gracias a la rápida acción de los miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR).
«La doctora Alexandra Bravo participaba en un operativo sobre los muertos del día martes en El Aromo, de la vía Puerto Cayo-Manta. Según las investigaciones, se tenía entendido que presuntamente en esta tagüera se encontraba uno de los involucrados en el doble crimen, pero al entrar al sitio fueron recibidos de esa manera, lo que dejó los resultados que ustedes ya conocen», informó el fiscal Vélez.
Aún nerviosa por lo ocurrido, la fiscal Bravo calificó como «el peor momento» de su vida el percance que había sufrido.
«Tuvimos que agacharnos y colocarnos en la parte de atrás del carro policial, mientras las balas nos caían», recordó.
Hasta la escena del crimen llegó un piquete de policías, para acordonar el sitio e impedir el acceso. Una mujer que se identificó como María Pacífica Macías, madre de Jaime Gilberto García, se acercó desesperada al cerco policial.
Con llanto pedía ver a su hijo, pero el cadáver ya estaba dentro de la ambulancia de Medicina Legal, para trasladarlo al anfiteatro.
En el allanamiento, los agentes de la Policía Judicial lograron retirar del sitio armas de fuego y un vehículo marca Tucson color blanco, de propiedad del fallecido.
Captura del sospechoso
Cerca de cien efectivos, acompañados por un helicóptero de la policía, se introdujeron desde la tarde del martes en las montañas húmedas del bosque de Pacoche, desde el sitio Liguiqui, ubicado en la vía Puerto Cayo-Manta (Manabí).
Se presume que hasta ese lugar huyeron los asesinos de Johan Meza Zambrano (de 28 años) y Richard Miguel Reina Rodríguez (de 25), quienes se movilizaban en una camioneta Ford 150.
Los sospechosos no pudieron escapar por la carretera principal debido a la rápida intervención que emprendió la policía, que acordonó la entrada y salida de la turística Ruta del Spondylus.
El control se multiplicó en esa carretera y uno a uno cada automotor que ingresaba era revisado en su totalidad.
En una de las montañas, la policía pudo ubicar en la madrugada a Freddy Vladimir Joza Matute. Las autoridades lo señalan como uno de los tres presuntos asesinos de Reina y Meza.
Uno de los agentes que participó en el operativo manifestó que el detenido habría confesado que dentro de la montaña también están los otros dos sospechosos, a quienes identificó con los alias de 'Andresito' y el 'Feo'.
Tras la aprehensión, Joza Matute fue llevado a Manta para la audiencia de formulación de cargos, por el doble crimen. Recibió prisión preventiva y fue trasladado a la cárcel El Rodeo.
Según el historial de antecedentes, el hombre presenta cinco detenciones: por robo, tenencia ilegal de armas, para investigaciones y ocultación de cosas robadas.