La fiscalía de París pidió el miércoles ante un tribunal francés 10 años de cárcel para el ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega por lavado en Francia de dinero del cártel de Medellín, la pena máxima por ese delito, y una multa de 2,3 millones de euros (2,8 millones de dólares)
“No puedo que pedirle otra cosa que no sea que lo declare culpable”, afirmó el fiscal, Michel Maes, en su alegato ante el Tribunal Correccional de París que desde el lunes juzga al ex hombre fuerte de Panamá, que hoy tiene 76 años, por el lavado de dinero en Francia a fines de los 80 de 15 millones de francos de entonces (2,3 millones de euros) .
En su alegato de casi una hora, el fiscal sostuvo que “el papel de Noriega fue simple y claro: proteger el transporte regular de droga por Panamá y de las sumas de dinero” que recibía de un “tráfico íntimamente vinculado con el cártel de Medellín”.
“¿Por qué poner el dinero en la BBCI de Panamá y no en el Banco Nacional de Panamá pues era el jefe del Estado?”, “¿Por qué abrir tantas cuentas en un banco”, “¿Por qué trasladarlo al extranjero y a Francia”, se preguntó el fiscal.
El ministerio público rechazó los reclamos de la defensa de Noriega referidos a la prescripción de la causa; su inmunidad como jefe de Estado y su estatuto de prisionero de guerra.