La Fiscalía sueca propuso este viernes interrogar al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en la embajada de Ecuador en Londres, donde está refugiado, lo que podría poner fin a un punto muerto iniciado hace casi 5 años en la investigación sobre posibles delitos sexuales.
Hasta ahora, la Fiscalía se había negado a tal posibilidad. La fiscal jefe, Marianne Ny, explicó el cambio de postura indicando que algunos de los delitos de los que está acusado Assange prescribirían en agosto.
Ny envió hoy una petición a los abogados del australiano «para saber si él aceptaría comparecer en Londres y que extraigamos una muestra de su ADN».
El abogado de Assange, Pers Samuelsson, dijo que su cliente aceptaría ser interrogado por magistrados suecos en la legación diplomática donde se refugia. «Cooperamos con la investigación, aceptará», declaró el jurista y dijo que su cliente está «feliz» por este paso adelante.
«Es algo que reclamamos desde hace cuatro años. Al mismo tiempo, él está exasperado porque le haya llevado tanto tiempo a la fiscalía dar este paso», añadió el jurista.
Assange cumplirá el lunes 1.000 días refugiado en la embajada de Ecuador, un periodo de confinamiento que ha comparado con vivir en una estación espacial.
La justicia sueca investiga demandas por violación presentadas por dos mujeres suecas contra Assange, de 43 años, quien por su parte las niega categóricamente.
El australiano ha afirmado también que teme que Suecia lo extradite a Estados Unidos por su papel en la publicación en el sitio de internet WikiLeaks de 250.000 telegramas diplomáticos americanos y 500.000 informes militares clasificados.
Ecuador acordó dar asilo a Assange en agosto de 2012 y ha reclamado en vano desde entonces poderlo aplicar. Pero a falta de poder llevar a Assange a Quito, aceptó que la audiencia tuviera lugar en Londres.
«El tiempo se acaba»
La Fiscalía sueca dijo haber cambiado de opinión porque varios de los hechos de los que se le acusa al fundador de WikiLeaks prescribirán en agosto de 2015, es decir, «en menos de seis meses».
«Mi postura es que las condiciones para una audiencia en la embajada de Londres son tales que la calidad de la audiencia sería incompleta por lo que sería necesario que él esté presente en Suecia si hubiera un proceso. Esta postura se mantiene», explicó la fiscal NY.
Sin embargo, reconoció que «el tiempo se acaba y considero que debo aceptar una pérdida de calidad en la investigación y asumir el riesgo de que el interrogatorio no ayude a su avance, ya que no hay otras medidas disponibles mientras Assange no esté en Suecia».
Según el comunicado, la intención de la fiscal es mandar «en breve» una solicitud de ayuda jurídica al Reino Unido, así como otra a Ecuador, para que el interrogatorio se realice en su embajada y se realicen pruebas de ADN.
Según el abogado de la defensa, la justicia sueca «ya tiene el ADN» de Assange. «No han dicho en qué podría serles útil», afirmó.
La defensa de Assange inició el verano pasado una nueva ofensiva en los tribunales suecos para pedir que se levantase la orden de prisión preventiva contra él dictada en 2010, origen de todo el problema, y denunció la pasividad de la fiscal.
Dos instancias jurídicas rechazaron la demanda apelando a la gravedad de los hechos y al riesgo de que Assange pudiese querer esquivar el proceso legal y una hipotética pena, resaltando además que él mismo podía poner fin a su encierro en la embajada.
Pero en su fallo de noviembre, pendiente de un recurso ante el Supremo, la Corte de Apelación también criticó a la fiscal por la paralización del proceso después de cuatro años y por no ofrecer soluciones alternativas.
«Hemos revisado de forma detallada los puntos de vista que Apelación presentó, y los dos últimos meses hemos tomado diversas consideraciones sobre cómo trabajar mejor en la investigación. Todo ello ha resultado en la decisión que he tomado», afirmó hoy Ny, que advierte de la «inseguridad» de los próximos pasos.
La fiscal adjunta en el caso, Ingrid Isgren, y un investigador de la Policía serían los encargados de viajar a Londres para realizar el interrogatorio, informó la Fiscalía, que no quiso dar más detalles ni hablar de plazos.
De su lado, Elizabeth Fritz, la abogada de una de las 2 mujeres suecas demandantes, se congratuló por la decisión. «Queremos que la investigación avance» y para eso era «necesario cambiar de opinión sobre el lugar de la audiencia», afirmó en un comunicado.
Fuente: El Telégrafo