EFE | TOKIO, Japón
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, advirtió hoy que se requieren acciones «urgentes» en la zona euro, aunque abogó por dar tiempo a la consolidación fiscal en los países con más problemas.
En su primera rueda de prensa con motivo de las asambleas del FMI y el Banco Mundial (BM) en Tokio, Lagarde situó a Europa como el «epicentro» de la actual crisis y consideró que, a diferencia de lo que se indicó en la reunión de primavera del organismo, en la actualidad ésta «no solo afecta a las economías avanzadas».
La ralentización se está extendiendo a los países emergentes, pero lo que el FMI considera prioritario en las condiciones actuales de «incertidumbre» -una de las palabras más repetidas en las reuniones de Tokio- es que en la zona euro haya más acciones y se apliquen «más rápido».
La titular del Fondo Monetario aplaudió varias medidas ya tomadas, como la operación de financiación a largo plazo (LTRO) del Banco Central Europeo de principios de este año y, lo que considera más importante, el nuevo programa de transacciones monetarias directas (OMT).
Pero también cree que es necesario agilizar algunas decisiones tomadas que se están materializando solo de forma «gradual», como el diseño de un sistema europeo de supervisión bancaria y «ojalá» una unión bancaria europea.
Aunque para estos aspectos pidió aceleración, la directora del FMI indicó que en ciertos casos es necesario conceder «un poco más tiempo», y esto afecta a varios países, incluido España, inmersos en programas para alcanzar el objetivo de reducir el déficit.
El propio FMI revisó recientemente al alza el impacto de los ajustes en estos países sobre el PIB, el llamado multiplicador fiscal, y dado que el efecto es mayor de lo inicialmente estimado (en algunos casos podría ser del doble) «no es sensato que nos limitemos únicamente a objetivos nominales», afirmó Lagarde.
En el caso de Grecia, el FMI está en el proceso de revisar los diferentes capítulos de su programa, desde las reformas estructurales aplicadas hasta su situación financiera y de deuda, con el objetivo de que «un día pueda volver a los mercados y no tenga la necesidad de apoyo constante».