En el portal de internet de la Fundación para la Observación Andina de Medios (Fundamedios) se dice que la publicación de los contratos que mantiene con la Relatoría para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) forman parte de “una campaña de descrédito”. Sin embargo, sí reconoce un vínculo formal.
Una de las relaciones entre estas dos organizaciones se dio “a inicios de 2011, participando como organización local en la realización de un acto académico (…) donde se dio a conocer la forma de funcionamiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos”, tal como Fundamedios lo reconoce en su página web, informó el periódico oficial El Ciudadano.
Varios documentos demuestran los vínculos comerciales entre Fundamedios, dirigida por el periodista César Ricaurte, y la Relatoría para la Libertad de Expresión de la OEA. Así lo denunció el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa, el 3 de diciembre.
Existen documentos comerciales de asesoría, charlas y seminarios que evidencian intereses particulares, lo que resta legitimidad a Catalina Botero, relatora para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sostuvo el secretario de Comunicación, Fernando Alvarado.
Los documentos revelan la sociedad que existe entre la Unión Europea, Fundamedios y la Relatoría. De su parte, el jefe de Estado dijo que “ese pequeño detalle” nunca se mencionó durante la visita de Fundamedios a Washington, durante la reunión que mantuvieron sus directivos ante la CIDH en días pasados.