REUTERS. LONDRES.- El Gobierno de coalición de Gran Bretaña analizará cuidadosamente la seguridad social, los créditos fiscales y las pensiones, en una revisión del gasto que formará la columna vertebral de sus esfuerzos para reducir el déficit presupuestario récord.
El déficit británico marcha cerca del 11 por ciento de la producción nacional.
Los presupuestos de salud y de ayuda al exterior han sido exentos de los recortes.
El plan de déficit probablemente implique pérdidas de empleos en el sector público y podría generar protestas de sindicatos en un momento en que la economía británica está saliendo de su peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.