La misión Manuela Espejo, integrada por médicos cubanos y ecuatorianos, inició una nueva e importante etapa de su labor al comenzar su trabajo en Guayaquil, la ciudad más poblada de Ecuador.
Capital de la provincia de Guayas, situada a orillas del río del mismo nombre en el sudoeste del país, representa un reto para los miembros de la misión con sus casi dos millones de habitantes y una población flotante que supera los tres millones.
Atrás los médicos cubanos y ecuatorianos dejaron una excelente muestra de su empeño al haber visitado más de 800 mil viviendas y estudiado e identificado a más de 200 mil personas con algún tipo de discapacidad en 22 provincias del país.
Ahora se proponen en un plazo de 20 días desplazarse por todo el territorio guayaquileño que incluye, no sólo la populosa ciudad descrita, sino las áreas más apartadas del municipio.
La llegada de la misión a Guayaquil no sólo constituyó un acontecimiento, sino provocó un saludo cariñoso de la población a los galenos y personal asistencial y de apoyo, todos empeñados en la tarea solidaria encomendada.
El trabajo, al igual que ha sido en el resto de Ecuador, constituye el primer estudio biosicosocial, clínico y genético que se realiza, casa por casa, para detectar y atender a los discapacitados y permitir al gobierno acceso a información y aplicar soluciones.
Emotiva fue la recepción, por ejemplo, en la cooperativa Proletarios sin Tierra, al sur de la gran ciudad, donde los pobladores mostraron su agradecimiento por ser objeto de una atención especializada jamás materializada antes.
De acuerdo a los pronósticos, la misión Manuela Espejo terminará su importante estudio en todo el país en el próximo mes de diciembre.