El presidente de Paraguay, Federico Franco, afirmó este viernes que el canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, cometió una intromisión “grosera” durante la crisis política que desembocó en la destitución del presidente Fernando Lugo el pasado 22 de junio.
“Las imágenes del Palacio de Gobierno constituyen una demostración clara de una intromisión grosera del canciller Maduro al contactar con los comandantes de las fuerzas militares”, subrayó el jefe de Estado en conferencia de prensa.
Franco afirmó que hay más documentos y testimonios que serán entregados a la fiscalía, que investiga el caso. La fiscal Stella Marys Cano dijo que “no existen dudas de esa reunión” del ministro venezolano con los mandos militares en el palacio de Gobierno. “Lo que estamos investigando es el contenido de esa reunión para ver si hubo un hecho punible”, agregó.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, rechazó el jueves las acusaciones de Paraguay contra Maduro, y ordenó el retiro de sus agregados militares en Asunción. A su vez, Maduro había dicho la semana pasada que la acusación “no tiene asidero en la realidad”.
Paraguay anunció el miércoles el retiro de su embajador en Venezuela y declaró “persona no grata” al embajador de Caracas en el país.
Chávez ya había ordenado el retiro de su embajador en Asunción tras la destitución de Lugo, así como el cese del suministro de petróleo a Paraguay, de unos 25 000 barriles diarios, que representan un 28,5% de su consumo de combustibles.
Por otra parte, Franco indicó que su gobierno no tomará una decisión en cuanto a si seguirá o no como socio pleno del Mercosur y que, de momento, reclamará sus derechos ante el tribunal jurisdiccional del bloque, que tiene sede en Asunción.
“Nuestro gobierno tiene un compromiso con la historia. Tenemos 14 meses de gobierno. No vamos a tomar ninguna decisión que hipoteque nuestro futuro”, enfatizó.