El titular del Seguro Social, Fernando Cordero, anunció que las personas de entre 18 y 60 años que padezcan enfermedades como hipertensión o diabetes, podrán afiliarse voluntariamente al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
En un encuentro con la prensa el lunes pasado, el titular del IESS, Fernando Cordero, reconoció que «en la práctica sí ha habido una discriminación» hacia las personas que padecen enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes, pues uno de los requisitos para la afiliación voluntaria es «no adolecer de enfermedades crónico-degenerativas o invalidantes, adquiridas con anterioridad a la solicitud».
Por ello, anunció: «díganles nomás a todos los enfermos crónicos mayores o menores de 40 años, que no tienen ningún problema y que van a ser recibidos por el IESS», aunque aún no se ha informado oficialmente el procedimiento que se aplicará con los nuevos afiliados y desde cuándo podrán presentar su solicitud.
Para Freddy Durán, de 47 años, su enfermedad ha sido un obstáculo para acceder al derecho a la salud. Hace un año le detectaron cáncer de riñón. Apenas llevaba nueve meses trabajando como mensajero en una empresa privada, por lo que su patrono desistió de renovarle el contrato.
Por ello acudió al IESS para afiliarse voluntariamente con el afán de menguar los altos costos del tratamiento, pero «también me cerraron las puertas. Me quedé en la nada». Ante el anuncio de Cordero, Freddy se siente esperanzado. «La falta de salud es un impedimento para llevar el pan de cada día a mi familia, pero la sociedad nos ha rechazado. Ojalá se dé este cambio lo más pronto posible», agregó.
Cordero invitó a las personas con enfermedades crónicas a presentar su solicitud de afiliación voluntaria. Sin embargo, en el portal web del IESS aún no consta dicho anuncio.