Hoy se conmemora el Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo, establecido por las Naciones Unidas en la Asamblea General, el 23 de diciembre de 1994, en la que decide que se celebre el 9 de agosto de cada año.
El tema central del Día Internacional de este año es «Pueblos indígenas construyendo alianzas: En honor a los tratados, acuerdos, y otros arreglos constructivos». Con esto se busca enfatizar la importancia de los tratados entre los Estados, sus ciudadanos, y los pueblos indígenas, que tienen como objetivo reconocer y defender sus derechos y sus tierras, y establecer un marco de convivencia y de relaciones económicas.
Esta fecha se origina en las Naciones Unidas como un hito para crear conciencia sobre la grave situación en la que viven los más de 500 millones de indígenas que habitan en el mundo y así promover la aplicación por los gobiernos sobre los derechos de los Pueblos Indígenas.
Estos constituyen los sectores más empobrecidos y despojados de la era de la globalización. El fin era marcar el respeto incondicional a la integridad y a la vida de los pueblos originarios que luchan por el derecho a la tierra. Un derecho fundamental para culturas que representan valores y formas integradas y solidarias con la tierra, cuya soberanía reside en el valor de sus formas de desarrollo muchas veces en conflicto con los modelos culturales hegemónicos.
Ecuador
En el país habitan 1'018.176 indígenas, según cifras del último censo realizado en Ecuador en el 2010. La población indígena aumentó a 187.758 desde el censo anterior, en el 2001, que registraba 830.418.
En la Constitución de la República del Ecuador contempla el respeto a los derechos de estas poblaciones. En el artículo 6, del capítulo segundo Ciudadanos y ciudadanas, el inciso Primero dice: «La nacionalidad ecuatoriana es el vínculo jurídico político de las personas con el Estado, sin perjuicio de su pertenencia a alguna de las nacionalidades indígenas que coexisten en el Ecuador plurinacional»; y también el artículo 2, del capítulo primero, del mismo inciso que dice: » El castellano es el idioma oficial del Ecuador; el castellano, el kichwa y el shuar son idiomas oficiales de relación intercultural. Los demás idiomas ancestrales son de uso oficial para los pueblos indígenas en las zonas donde habitan y en los términos que fija la ley. El Estado respetará y estimulará su conservación y uso».
Además la Carta Magna hace referencia con mayor extensión sobre este tema en el Capítulo cuarto:
Derechos de las comunidades, pueblos y nacionalidades; en los artículos 56 y 57.
Para la asambleísta ecuatoriana Lourdes Tibán la lucha por el respeto de los derechos de los indígenas comenzó con «el levantamiento del 90 que es un hecho ineludible, es el punto donde el Estado como Ecuador comienza a tomar en cuenta a los pueblos indígenas», afirma.
Tibán, quien se dio a conocer por ser una dirigente indígena en Pachacutik, tiene un doctorado en Jurisprudencia de la Universidad Central de Quito y un Diplomado en Derechos Humanos y Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina realizado en México. Además es Master en Ciencias Sociales con Mención en Asuntos Indígenas. Con su experiencia y conocimiento, Lourdes ha palpado de cerca la realidad indígena en el país. Ella cuenta que el proceso de lucha para que el Estado tenga mayor apertura con esta cultura es también por la organización con el que se manejaron siempre estas comunidades.
«El auge organizativo de los 70 – 80 del movimiento indígena fue la estructura más novedosa para toda latinoamerica. El movimiento indígena se ha civilizado sin que exista de por medio armas, corridas de sangre como en otros países que se buscan los cambios sociales a través de guerras», expresa Tibán.
De esta manera Ecuador se convirtió en un referente «porque ha hecho cambios desde la organización, pues se formaron movimientos políticos que son estructuras que vinieron desde los años 60 hasta llegar a la culminación en la CONAIE en 1986».
La legisladora oriunda de Cotopaxi cuenta que desde que está inmersa en la política ha luchado para que este día 9 de agosto sea institucionalizado en el país como una celebración de mayor homenaje. «Yo antes propuse al Congreso Nacional que asuma el 9 de agosto como día internacional como en el país se hace con el Día de la mujer, el Día de la madre, así como en otras fechas; pero dijeron que no era necesario. El 9 de agosto solo los indígenas lo recordamos pero el Estado como tal no hay más que un reconocimiento tácito».
La inclusión de los indígenas en la sociedad es otro tema que Tibán manifiesta que se han dado esfuerzos significativos sobre todo a nivel de la educación pero, en lo laboral aún está pendiente.
Hoy a estas comunidades se les rinde un homenaje por su lucha constante por preservar sus costumbres y raíces en el país.