El Consejo de la Judicatura de Transición (CJT) entregó este jueves al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs), el informe técnico sobre las observaciones realizadas por la Veeduría Internacional al proceso de reestructuración de la justicia en Ecuador.
El titular de la CJT, Paulo Rodríguez, indicó que las 44 recomendaciones y observaciones «están totalmente cumplidas». Afirmó que «se ha cambiado el alma y el espíritu del sistema judicial, no solo la cara de la justicia».
En ese sentido, rechazaron las críticas hechas por varios sectores sobre el informe entregado por el coordinador de la Veeduría, el ex juez español Baltasar Garzón, acerca de supuestas irregularidades en el proceso de transformación judicial.
Rodríguez dijo que estas críticas son realizadas por actores políticos que buscan notoriedad para los próximos comicios de febrero.
De su lado, la vocal Tania Arias resaltó los procesos de selección y concursos de jueces. Se refirió a la Corte Nacional de Justicia (CNJ) y dijo que «es legítima, porque fue seleccionada en base a principios constitucionales y al marco legal vigente».
Explicó que el proceso de conformación fue «transparente, equitativo e inclusivo», que contó con una etapa de impugnación para que los ciudadanos presenten sus argumentos del por qué un candidato no debería ser magistrado del máximo órgano judicial ecuatoriano.
«La nueva Corte Nacional de Justicia es constitucional, legal y legítima y esa será nuestra posición», reiteró Paulo Rodríguez.
Los representantes de la Judicatura recalcaron también que «por primera vez en el Ecuador la justicia ya no responde a otros poderes, ni a otras funciones del Estado».
«Ahora en Ecuador los jueces se eligen por sus méritos, por su experiencia y legitimidad moral y legal», añadieron.