La Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) se pronunciará a finales de este mes, de “manera formal”, sobre los cuestionamientos que el Ecuador y otros países de la región han realizado en cuanto al tratamiento de los derechos humanos al interior de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Así lo enfatizó el secretario del organismo, José Miguel Insulza, al finalizar la visita que realizó al país, en donde se reunió con el presidente Rafael Correa y que calificó como “positiva”. Dijo que un pronunciamiento sobre ese tema lo dará antes de la 42 Sesión Ordinaria Permanente de la OEA, que se desarrollará en Cochabamba (Bolivia), en junio de este año.
El tratamiento de la agenda de este encuentro, a la que Ecuador sí asistirá, fue parte de los temas que se debatieron, así como las acciones en contra del narcotráfico que la OEA está emprendiendo. Esto último fue catalogado como prioritario en la Cumbre de las Américas, que se desarrolló en abril de este año en la ciudad turística de Cartagena, Colombia.
Sobre los cuestionamientos realizados por el Gobierno ecuatoriano a la CIDH, Insulza reiteró que se pronunciará en la cita de Cochabamba. Pese a ello, el canciller Ricardo Patiño dijo que los procesos van “por buen camino”.
Insulza señaló que “los temas de derechos humanos deben ser adecuadamente resueltos y reglamentados”, por lo que aún se analiza en qué instancia se trabajará: la CIDH o la Asamblea General. “En eso estamos trabajando, pero son cosas que se deben consultar con todos los países miembros y no solamente con uno”. El criterio fue compartido por Patiño, quien dijo que se conversó sobre la posición del Ecuador, pero que los acuerdos se concretarán en la reunión de Bolivia.
Insulza mostró total apertura a los cambios que podrían realizarse al interior de la organización, pero también defendió la autonomía de la entidad. Ante una eventual salida de Venezuela de la organización explicó que no hay un “oficio formal”.
María Isabel Salvador, representante de Ecuador ante la OEA, manifestó que el tema de la CIDH es prioritario para el Ecuador y los Estados que conforman la región, “sobre todo para quienes nos hemos suscrito y adherido a la Convención de Derechos Humanos”.
A su criterio, por parte de Insulza hubo acogida: “Estuvo abierto a escuchar los pedidos de los Estados e implementarlos”. Pero la invitación que realizó el Ecuador para que la CIDH, el 13 de junio próximo, constate el manejo de la libertad de expresión en el Ecuador, podría postergarse.
Patiño informó que de manera “informal” conocieron que los comisionados de la CIDH tienen dificultades. Salvador reiteró que al país le interesa que estén presentes los siete comisionados de la CIDH.
A Insulza le parece bien que, como lo hacen las Naciones Unidas, “los países en vías de desarrollo se coordinen en un foro como la Celac o la Unasur, una aspiración suya y que la recogió en un libro en 1996. Para Patiño, que existan estos organismos no desgasta la relación con la OEA.
Insulza así lo reiteró y dijo que la creación de esos organismos no es “un obstáculo para que tengamos un organismo hemisférico fuerte y cooperativo”. Sobre la idea de crear un nuevo sistema, enfatizó: “Hablo sobre mi organización, sobre otras no”, así como advirtió que la propuesta de cambio de la sede de la OEA a Panamá “aún no se ha discutido”.