Japón desplegó un sistema antimisiles en el centro de Tokio a fin de interceptar el cohete que Corea del Norte tiene previsto lanzar en los próximos días en caso de que su trayectoria suponga un riesgo para la capital, informó ayer el Ministerio nipón de Defensa.
Pyonyang, que no consiguió colocar en órbita un satélite en sus dos anteriores lanzamientos en 1998 y 2009, asegura que el disparo de su cohete solo tiene un objetivo civil.
Sin embargo, dos unidades dotadas de sistemas de misiles tierra-aire Patriot Advanced Capability-3 (PAC-3) se han situado en las instalaciones deportivas del Ministerio de Defensa de Japón (foto), que se encuentra rodeado de casas y oficinas, como parte del plan de contingencia nipón.
El perímetro en el que están los misiles, donde habitualmente soldados y funcionarios del Ministerio realizan actividades deportivas, está custodiado por miembros del Ejército.
Un sistema similar también ha sido instalado a las afueras de Tokio, en las bases de Asaka y Narashino, en los municipios de Saitama y Chiba, respectivamente, así como en diversas islas de Okinawa (sur), sobre las que se espera que sobrevuele el proyectil norcoreano, detalló un portavoz de Defensa.