Un hincha del Corinthians de 17 años que se declara autor del disparo de un proyectil que acabó con la vida de un adolescente boliviano durante un partido de la Copa Libertadores la semana pasada se presentó hoy ante la Justicia brasileña de menores en el estado de Sao Paulo.
El supuesto autor del disparo, cuyo nombre no ha sido divulgado por las autoridades, compareció para prestar declaración acompañado de un abogado en las dependencias judiciales de la infancia y la juventud de la ciudad de Guarulhos, próxima a Sao Paulo, a primeras horas de esta tarde, según distintos medios locales.
La víctima, Kevin Douglas Beltrán Espada, de 14 años, falleció el pasado miércoles a causa de las graves heridas provocadas por el impacto en el rostro de una bengala usada para hacer señales marítimas, que supuestamente fue lanzada por hinchas del Corinthians en un partido disputado contra el San José, en la ciudad boliviana de Oruro.
El proyectil penetró hasta la zona encefálica del chico y le causó la muerte casi que inmediata, según los médicos que le atendieron.
El joven que se atribuye el disparo se entregó después de haber reconocido en una entrevista difundida anoche en el programa «Fantástico», del canal Globo, su responsabilidad en el delito y aseguró que se trató de un acto accidental.
Además, dijo que miembros de la hinchada organizada «Gaviões da Fiel», del Corinthians, a la cual pertenece, le aconsejaron no entregarse a la policía hasta que estuviera en territorio brasileño.
El joven descartó estar asumiendo la responsabilidad del delito por ser menor de edad para proteger a terceros puesto que, por las leyes brasileñas, no se puede procesar penalmente a menores de 18 años.
Los seguidores del Corinthians, actual campeón de la Libertadores, celebraban un gol anotado por el delantero peruano Paolo Guerrero cuando se produjo el incidente.
Doce hinchas brasileños del Corinthians están detenidos en Oruro desde el jueves por este hecho y la fiscalía boliviana acusó de homicidio a dos de ellos, mientras que a los otros diez los considera cómplices.
A raíz de la tragedia, la Conmebol impuso al Corinthians una sanción que le obligará a jugar sin hinchada sus partidos como local de la Libertadores, decisión que el club recurrió por considerarla «injusta».
De acuerdo con el club brasileño, la sanción perjudica directamente a hinchas «inocentes» que ya adquirieron las entradas para los partidos que el equipo disputará como local en la actual edición de la Libertadores.