En la escuela República de Venezuela, en Tulcán y Argentina, aproximadamente a las 11:30, el director Carlos Navarro solicitó una reunión con parte del cuerpo docente para planificar la implementación de la nueva jornada laboral dispuesta por el Ministerio de Educación (ME).
Mientras esto ocurría en ese salón, otros maestros se mantuvieron dentro de sus respectivas aulas para atender las inquietudes de los padres de familia, quienes se acercaron para conocer las reacciones de sus representados ante los nuevos horarios.
En un recorrido que realizó este Diario por varias escuelas de Guayaquil, observó que las autoridades han tomado esta semana como un tiempo para que las comunidades educativas (docentes, padres de familia y estudiantes) se adapten a la nueva jornada laboral dispuesta por el ME.
En la jornada matutina, los profesores laborarán de 06:45 a 14:45 (antes era de 07:30 a 12:30); en la vespertina, trabajarán de 11:00 a 19:00 (antes era de 13:30 a 18:30. En este último caso, el ME propuso el horario de 12:00 a 20:00, pero se cambió en consenso con los maestros para preservar su seguridad, especialmente en las zonas rurales y urbano marginales.
En la nueva jornada, los maestros dedicarán las 2 últimas horas, luego de concluidas las clases, a la atención de los padres de familia y estudiantes.
Adaptación a la nueva jornada educativa
Los estudiantes, durante esta semana, se retiran a sus casas a las 11:00; a pesar de que está establecido que ellos desarrollen sus clases entre las 07:45 y 12:45.
La Dirección de Educación del Guayas permitió dicha situación, previa aprobación del requerimiento, solo a los planteles de enseñanza inicial y básica.
El titular de este despacho, Juan Carlos Rodríguez, puntualizó que esto se da para permitir la adaptación de los más jóvenes al nuevo horario. “Ningún colegio, a menos que esté siendo intervenido para obras, está autorizado para acortar la jornada”, aclaró.
En la escuela República de Venezuela, ayer los padres de familia se acercaron para conocer las nuevas disposiciones del año lectivo 2011-2012.
Beatriz Cedeño, quien vive en Carchi y Letamendi, cuya hija cursa el quinto año de básica, tiene dos años como integrante de la comunidad del plantel.
Para Cedeño resulta una novedad que bajo las recientes disposiciones, ahora deba participar activamente de la planificación de actividades culturales y solicitar mejoras para la escuela.
“Es una responsabilidad mayor y nos impulsan a ser tan creativos y responsables como nuestros hijos”, dijo Cedeño, a quien le quedaron dudas sobre su disponibilidad de tiempo.
El director de la escuela República de Venezuela, Carlos Navarro, explicó que la nueva carga horaria permitirá dinamizar la enseñanza y aprovechar las horas de clase.
“Anteriormente los padres buscaban a los maestros a la entrada o en el recreo, lo que interrumpía el inicio de las clases”, aseguró.
La adaptación le cuesta a la mayoría de representantes, aseguró Glenda álvarez, directora de la escuela Vicente Rocafuerte, en Capitán Nájera y José Mascote.
“Al menos el 70 % tiene problemas debido a que debensalir muy temprano de sus casas y les queda mucho tiempo de sobra antes de ir a sus trabajos”, afirmó.
La jornada nocturna también tendrá varios cambios. Los profesores laborarán seis días a la semana de la siguiente manera: de lunes a viernes trabajarán desde las 19:00 hasta las 22:35, y los sábados desde las 13:00 hasta las 18:50.
Otra inquietud que presentaron los docentes de la jornada matutina es la disponibilidad de espacio para atender a los padres de familia y estudiantes, sin afectar las clases de las escuelas vespertinas y que comparten un mismo espacio.