La Asamblea tuvo ayer su primera sesión del año y el primer tema que abordó fue el pedido de licencia hecho por el presidente Rafael Correa para participar en la campaña electoral que inicia mañana.
Con 97 votos a favor, dos negativos y una abstención la Asamblea aprobó la solicitud del Jefe de Estado. El sufragio estuvo precedido de un largo debate.
La sesión cobró interés porque en la mañana el presidente del Legislativo, Fernando Cordero, no daba por sentado la aprobación del permiso. Correa necesitaba 63 voluntades para encargar la conducción de la Función Ejecutiva a Lenín Moreno.
En este tema la oposición se había mostrado dispersa. Ningún dirigente de bancada se atrevió a decir frontalmente si aceptaba o no la licencia.
La mayoría hablaba de las ventajas de PAIS en las elecciones, el uso de bienes del Estado, las cadenas de la Secretaría de Comunicación. Esas posturas fueron ratificadas en el debate.
La sesión se instaló a las 16:10. El pleno se inició apenas con 89 parlamentarios.
Diez asambleístas se inscribieron para intervenir. El primero en hablar fue Marco Murillo, quien legitimó el pedido de Correa pero pidió que se debata sobre la utilización de recursos públicos en la campaña electoral. “No es justo que pelee David contra Goliat”, dijo en cambio Luis Almeida, de Sociedad Patriótica. él reconoció que “es una posición decente la del Presidente”.
Lourdes Tibán destacó que por primera vez dará un voto al presidente. Pero al mismo tiempo exigió que se suspendan los enlaces ciudadanos, eso le daría mucha paz, dijo.
Las cadenas sabatinas estarán a cargo de Moreno desde esta semana y hasta después de los comicios del 17 de febrero.
Luis Morales, del Prian, propuso que se extienda el permiso hasta el 18 de febrero y no hasta el 15, como consta en el documento. Eso molestó a Cordero, quien pidió al legislador que lea con atención el artículo 42 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa que impide cualquier tipo de enmienda.
Esa posición fue reafirmada posteriormente por Virgilio Hernández, de PAIS.
En el bloque oficialista había tranquilidad y seguridad. Juan Carlos Cassinelli, primer vicepresidente de la Asamblea, calificó como ético y dentro del cauce democrático el pedido del Primer Mandatario. Recordó a sus colegas que buscan la reelección que ellos también deberían pedir licencia.
Algunos altercados se presentaron cuando intervino Xavier Tomalá, quien defendió las acciones del Gobierno. Los ánimos subieron cuando la prensa entró y asambleístas como Fausto Cobo y Cléber García, de Sociedad Patriótica, gritaban “Que entren todos” porque creyeron que solo ingresaban los reporteros de los medios públicos.
En realidad se había dado la disposición de que los periodistas entren por turnos al salón del pleno. Correa justificó el pedido de licencia en el último enlace ciudadano de 2012. Allí indicó que tomaría el permiso para “evitar suspicacias de la oposición”.
El Mandatario hacía referencia a posibles acusaciones para deslegitimar el proceso electoral. Y es que en los últimos días la oposición se ha quejado por una supuesta ventaja por parte de PAIS.