Las inundaciones que se registran en el Chaco paraguayo debido a las lluvias y la crecida del río Pilcomayo, en la frontera con Argentina, han afectado a un total de 13.654 familias, informó este lunes una fuente oficial.
Un reporte de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) detalla que las persistentes lluvias dejaron sin viviendas a 8.626 familias en el departamento de Presidente Hayes, 3.485 en el de Boquerón y 1.543 en el de Alto Paraguay.
El informe, recogido por la agencia oficial IP Paraguay, refiere que la SEN asiste desde el 9 de abril a las familias afectadas, en coordinación con otras entidades del Estado, Gobiernos locales, organizaciones civiles y no gubernamentales.
Las lluvias se registran desde hace varias semanas en los tres departamentos (provincias) chaqueños, que delimitan con Argentina, Brasil y Bolivia, aunque la región más golpeada es la denominada Chaco Central, en las proximidades del río Pilcomayo.
Este río, que separa Presidente Hayes y Boquerón con las norteñas provincias argentinas de Salta y Formosa, nace en Bolivia y en su desborde también ha inundado numerosos poblados, entre ellos aldeas indígenas, y extensas áreas ganaderas en el lado paraguayo.
Las autoridades chaqueñas y los medios reportaron la muerte de al menos seis personas vinculadas a falta de una oportuna y adecuada asistencia médica debido al estado de aislamiento de muchos de los asentamientos.
Unos 400 niños de Fortín General Díaz, situado 450 kilómetros al noroeste de Asunción, cerca de la provincia argentina de Formosa, asistirán a una escuela itinerante que instalará el Ministerio de Educación, anunció hoy el titular de esta cartera, Víctor Ríos.
Los menores, que siguen en las áreas inundadas, no asisten a la escuela y «a ellos queremos llegar directamente con materiales de apoyo hasta tanto se pueda normalizar la situación», afirmó Ríos, citado por IP Paraguay.
El Gobierno argentino colabora con la emergencia con el envío de equipos de ayuda y de un helicóptero que la SEN emplea para el envío de alimentos y el traslado de los damnificados a zonas más seguras de la planicie chaqueña.
La situación ha obligado al Gobierno paraguayo a decretar, la pasada semana, el estado de emergencia en el Chaco al igual que el Congreso, con el objetivo de liberar excepcionalmente recursos o la ampliación de los mismo para las tareas de ayuda.
Asimismo, artificieros de las Fuerzas Armadas esperan completar hoy la voladura de tres diques construidos en época de sequía por hacendados de la cuenca del Pilcomayo, que nace en las estribaciones andinas bolivianas, y de los ríos Montelindo y Negro.