El monto de los depósitos de las 25 instituciones bancarias que conforman el sistema financiero nacional subió en 17% en
abril pasado, para ubicarse en casi un presupuesto fiscal, según reportes de la Superintendencia de Bancos.
Más de un factor incidieron en ese incremento. De acuerdo con la información difundida por el organismo, en abril ese
rubro se situó en $ 14.807,92 millones, unos $2.174,89 millones más que en abril del 2009, cuando estuvo en $ 12.633,03
millones.
Los depósitos que más crecieron fueron los denominados a la vista (cuentas corrientes y de ahorros), que son los de mayor
movilidad y más relacionados con la mayoría de la población; estos pasaron de $ 8.888,54 millones a $ 10.517,28 millones,
equivalentes al 18% más.
Mientras que los depósitos a plazo (inversiones a cambio de un rendimiento mensual, mínimo) experimentaron un incremento
del 15%, al situarse en $ 4.290,67 millones frente a los $ 3.744,49 millones de abril del año pasado.
Las estadísticas de la Superintendencia dejan ver además que dentro de los depósitos a plazo, pese a que registraron un
incremento del 15% en un año, el cliente aún no se arriesga a inmovilizar su dinero por más de tres meses.