Oroitz Gurruchaga, presunto jefe de los grupos armados de ETA y su lugarteniente, Xabier Aramburu, portaban, en el momento de su detención el pasado domingo en el sur de Francia, un kilo de material para la fabricación de explosivos y varias ampollas de mercurio, utilizadas en estos artefactos.
El ministro español del Interior, Jorge Fernández Díaz, avanzó esta información en una rueda de prensa conjunta con su homólogo francés, Manuel Valls, con el que reunió hoy en Madrid a apenas 48 horas de las dos últimas detenciones en Francia.
Fernández Díaz destacó que esta información no ha sido proporcionada por ningún grupo de «verificadores internacionales» del alto el fuego de la banda terrorista, sino por los únicos verificadores que necesita el Gobierno español, es decir, la Policía y la Guardia Civil.
Además de ese material, los terroristas detenidos tenían en su poder siete placas falsas de matrículas francesas, diversa documentación falsa de ciudadanos españoles, italianos y franceses, además de dos ordenadores con sus correspondientes discos duros.
«No es normal que los ciudadanos normales vayan armados, con documentación falsa , con vehículos robados y material que sirva para fabricar explosivos», subrayó Fernández Díaz.
Oroitz Gurruchaga, cuyo hermano, Egoitz, falleció en septiembre de 2002 al estallarle un artefacto que manipulaba en Bilbao, fue miembro de la organización juvenil de ETA -SEGI- e integrante de un grupo de violencia callejera.
En abril de 2000 fue detenido por la Policía y puesto a disposición de la Audiencia Nacional española, que decretó su ingreso en prisión.
Tras su puesta en libertad y a la espera de juicio, asumió la responsabilidad de un grupo que desarrolló numerosas acciones de sabotaje y violencia callejera hasta abril de 2008, fecha en la que, para eludir una nueva detención, pasó a la clandestinidad.
Unos meses después, en diciembre de 2008, y junto a otras nueve personas, informó a través de un vídeo difundido por los diarios vascos Gara y Berria de su decisión de integrarse en la estructura de ETA.
Xabier Aramburu, que también fue miembro de SEGI, participó en acciones de violencia callejera desde el año 2000, hasta que en el verano de 2005 pasó a colaborar con un grupo armado a las ordenes directas del por entonces máximo responsable de la banda, Garikoitz Aspiazu Rubina, «Txeroki».
Las dos detenciones realizadas este domingo en Francia elevan a 15 el número de personas arrestadas por su supuesta vinculación con ETA desde que la banda terrorista anunció el pasado 20 de octubre el cese definitivo de la violencia.