El ministro de Salud, David Chiriboga, hizo un llamado a la ciudadanía, farmacias, clínicas y hospitales privados y medios de comunicación para tener una actitud responsable y de prevención frente a incremento de casos de influenza. El secretario de Estado señaló además que no existe una epidemia de AH1N1 en Ecuador.
Según el secretario de Estado, actualmente hay un incremento en el número de casos de influenza en la Sierra, particularmente en las ciudades de Quito e Ibarra, esto provocado por la estación climática caracterizada por el frío y la humedad lo que ha acrecentado la demanda de atención en los hospitales de las mencionadas ciudades.
El incremento de casos, según el ministro, está dentro de los parámetros esperados.
La tendencia histórica de aumento de casos de influenza (en datos revisados desde el 2002 hasta la fecha) indica que entre los meses de diciembre a marzo hay un aumento de los casos de influenza, presentándose el pico mayor en marzo.
Chiriboga informó que el Ministerio de Salud mantiene una vigilancia epidemiológica constante y los resultados obtenidos hasta hoy en las casas de salud públicas son los siguientes:
– De 467 muestras de laboratorio, realizadas a casos identificados como sospechosos, 35 dieron como positivos de AH1N1, 121 casos fueron positivos para otros virus de influenza estacional y los demás corresponden a otro tipo de infecciones respiratorias
– Durante la última semana de diciembre de 2010 en los hospitales de Quito, en los cuales se realiza vigilancia centinela, se hospitalizaron 137 pacientes con infección respiratoria aguda grave. Ocho de estos fallecieron, tres en el Hospital Eugenio Espejo, tres en el Hospital Enrique Garcés y dos en el Hospital Carlos Andrade Marín. En ninguno de estos casos se ha confirmado el diagnóstico de AH1N1. Estos fallecimientos son lamentables, sin embargo el número está dentro del rango esperado.
De lo anterior, dijo, se puede concluir que estamos frente a un incremento de casos pero no frente a un brote epidémico.
Asímismo, el ministro hizo un llamado a la Asociación de hospitales y clínicas privadas para que apoyen las acciones de vigilancia epidemiológica, notificando al Ministerio de Salud la información sobre los pacientes atendidos por influenza. Esto porque, pese a que es una obligación, no siempre se notifica.