Rusia considera una tendencia peligrosa la intensificación de las actividades de los rebeldes sirios la víspera o durante los debates en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el arreglo de la crisis en Siria, declaró ayer el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Guennadi Gatúilov.
“Existe una tendencia peligrosa: cuando se desarrollan debates en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el arreglo de la crisis en Siria, los rebeldes organizan más atentados para lograr su fracaso”, escribió el diplomático en su microblog de Twitter.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas votó este miércoles dos proyectos: el occidental, con amenazas de sanciones a Siria, y el ruso, orientado a prorrogar la estancia en el país de los observadores de la ONU y buscar vías para entablar diálogo entre las autoridades y la oposición armada de Siria.
Además ayer se produjo una potente explosión en la sede de Damasco del Servicio de Seguridad Nacional de Siria. Un kamikaze se dinamitó en los momentos en que allí estaban reunidos los dirigentes de ese Servicio y unos ministros del Gobierno sirio. Según unos medios noticiosos, el atentado suicida fue realizado por un miembro del cuerpo de guardia del presidente Bashar Asad.
Murieron el ministro de Defensa, el general Daud Abdelá Rayiha, y su vice y cuñado del presidente Bachar al Asad, el general Asef Shauqat. Resultaron heridos el ministro del Interior, Mohamed Ibrahim al Shaar, y el jefe de la Seguridad, Hisham al Ijtiar.
Según unos medios noticiosos, en la capital siria se registran enfrentamientos armados entre los grupos de los rebeldes y las tropas gubernamentales.
Anteriormente, el 26 de mayo y el 13 de julio, en vísperas de los debates planeados en el Consejo de Seguridad de la ONU, fue cometida una matanza de civiles en los poblados sirios de Hula y Tremseh. Murieron centenares de personas.
Los enfrentamientos armados entre las tropas leales al presidente sirio Bashar Asad y los grupos armados de la oposición causaron en Siria más de 10.000 muertos desde marzo de 2011, según estimaciones de la ONU. El número de víctimas mortales en el conflicto aumenta a diario.
A mediados de abril, un grupo de observadores de la ONU llegó a Siria para controlar el alto el fuego declarado como parte del plan de paz de Kofi Annan. Sin embargo, este plan no se cumple.