El Ministerio de Defensa yemení dio cuenta en un escueto comunicado del fallecimiento de Al Awlaki, de nacionalidad estadounidense y origen yemení, lo que fue confirmado después por el Gobierno de EEUU.
Aunque en un principio ninguna fuente oficial confirmó las circunstancias del suceso, finalmente funcionarios de Washington precisaron que Al Awlaki murió en el ataque de un avión estadounidense no tripulado y armado con misiles Hellfire.
Fuentes militares yemeníes, por su parte, detallaron previamente que el clérigo murió por un ataque estadounidense durante la madrugada del viernes en la provincia de Shabua, ubicada a 570 kilómetros al sureste de Saná.
Junto con Al Awlaki, cuyo cadáver fue reconocido, también fallecieron otros tres miembros de la organización terrorista, entre ellos un ciudadano estadounidense de origen paquistaní identificado como Samir Jan, agregaron a Efe fuentes de seguridad y tribales.
Durante meses, el influyente dirigente de Al Qaeda había esquivado la persecución de las autoridades estadounidenses y yemeníes, que desde hace años mantienen una estrecha colaboración en la lucha contra el terrorismo.
A principios de mayo pasado, salió ileso de un ataque aéreo perpetrado también por EEUU en la misma provincia de Shabua, considerada refugio de numerosos miembros de Al Qaeda, que a veces cuentan con el apoyo de tribus locales.
En abril de 2010, Al Awlaki se convirtió en el primer ciudadano estadounidense incluido en una lista de terroristas que la CIA tiene autorización de matar.
El pasado mes de mayo, salió ileso de otro ataque aéreo perpetrado por EEUU en la misma provincia de Shabua, refugio de numerosos miembros de la organización terrorista que algunas veces cuentan con el apoyo de las tribus locales.
El clérigo comenzó a cobrar notoriedad cuando fue acusado de mantener contactos con el comandante estadounidense Nidal Malik Hasan, que mató a trece personas en noviembre del 2009 en la base de Fort Hood, Texas.
Además, él mismo reconoció haber adoctrinado al joven nigeriano Faruk Abdulmutalab, quien intentó hacer estallar un pequeño artefacto explosivo durante un vuelo comercial que iba a aterrizar en Detroit (EEUU) el 25 de diciembre de 2009.
Al Awlaki había defendido los atentados cometidos por Al Qaeda contra los estadounidenses en venganza por la muerte de «miles» de musulmanes en Irak, Afganistán y en los territorios palestinos.
La red terrorista Al Qaeda cuenta con campos de entrenamiento en Yemen, según las autoridades yemeníes y estadounidenses, y se cree que centenares de partidarios de ese grupo están escondidos en las montañas del sur del país, especialmente en la provincia de Shabua.