Pasada las medianoche, un grupo de trabajadores llegó con dos camiones hasta la planchada del Barrio Las Peñas, en el centro de Guayaquil. Tras una inspección, la Policía confirmó que en las plataformas se llevaban estructuras de mármol y rejas. Ya en la mañana, los obreros comenzaron a trabajar en lo que sería la base del monumento al ex presidente León Febres Cordero.
El alacalde Jaime Nebot recorrió esta mañana el Malecón desde el Palacio de Cristal hasta la planchada de Las Peñas, y al llegar se paró sobre un generador que hizo las veces de tarima. Desde el improvisado podio, el principal personero municipal y la asambleísta Cinthya Viteri se dirigían a una multitud de simpatizantes que llegaron hasta el sector.
El funcionario municipal sostuvo que esta ciudad se ha caracterizado por darle apertura a todas las ideologías y por ello recordó que cuando se planteó poner un monumento del Che Guevara se aprobó.
En su cuenta de Twitter, el alcalde confirmó que ahora se trabaja en colocar la cerca para delimitar el área de trabajos donde se ubicará el monumento al ex mandatario.
La decisión de Nebot se tomó pese a que existe una orden judicial que prohíbe la instalación del monumento de LFC en la planchada del Barrio Las Peñas.
Hasta este mediodía se preparaba el escenario para que el alcalde de Guayaquil dé un discurso más amplio.
Por su parte, la Ministra de Patrimonio Cultural, María Fernanda Espinoza, señaló que se tomarán acciones legales con respecto a la actitud del cabildo de Guayaquil. La Secretaria de Estado sostuvo que las acciones del personero municipal son una violación a las leyes de Ecuador.
Hasta el lugar han llegado simpatizantes de Madera de Guerrero y el Partido Social Cristiano, que estaban en el Palacio de Cristal, donde se realizaba la recolección de firmas para la reinscripción del movimiento. Además, la alta dirigencia de las dos agrupaciones políticas acompañó a Nebot en su permanencia en Las Peñas.
Hasta el mediodía, un grupo de policías del GIR y GOE vigilaban el sector. Mientras que decenas de miembros de la guardia municipal miraban atentos los movimientos de los políticos.