Las familias que al momento están invadiendo las zonas de seguridad recientemente declaradas como tales en Guayaquil, no serán incluidas en el plan de reasentamiento que impulsa el Gobierno. Los organismos correspondientes cuentan ya con los elementos técnicos necesarios para comprobar qué viviendas estuvieron en esos sitios hasta el día en que el Presidente Rafael Correa hizo el anuncio de la reubicación.
Así lo indicó el ministro de Vivienda, Walter Solís, quien en una entrevista con El Ciudadano, indicó que para la reubicación de las familias que han vivido en las zonas invadidas se contará con la colaboración del Instituto Geográfico Militar que proporcionará las imágenes aerofotogramétricas del día en que el Mandatario anunció el plan de reasentamiento.
Estas fotografías satelitales permitirán identificar las viviendas que se hallaban asentadas en las zonas de seguridad hasta antes del 28 de diciembre de 2010 y también aquellas que se han edificado en los últimos días.
Con esta información se realizará un levantamiento catastral con el cual, entidades como el Ministerio de Vivienda, podrán censar a las familias que serán beneficiadas con el programa de reubicación que prevé la entrega de un bono de hasta $12 mil.
El ministro explicó que para acceder a este incentivo económico, los beneficiarios deberán aportar con una contraparte que dependerá del proyecto y del tipo de vivienda en el que sean reasentados.
Lo que debe quedar claro, de acuerdo a lo que dijo Solís, es que quienes en los últimos días y horas han invadido las zonas de seguridad y al momento se hallan levantando casas, no serán incluidos en el programa de reasentamiento.
El funcionario insistió en el pedido del Gobierno para que los moradores de asentamientos como Ciudad de Dios, La Karolina, Tierra Prometida, Fortaleza, etc., denuncien a quienes quieren estafarlos con la supuesta venta de terrenos en las zonas protegidas.
De igual forma, reiteró la solicitud para que no se cancele ningún tipo de supuesto servicio básico (agua, luz, etc.) que ofrezcan los traficantes de tierras.