Cerca de cuatro millones de litros de petróleo se derramaron en un río del estado de Michigan (norte de Estados Unidos), tras la ruptura de un oleoducto, informaron autoridades.
La agencia de protección del medioambiente de Estados Unidos (EPA) indicó el miércoles en un comunicado que la fuga había comenzado el lunes cuando un oleoducto de 76 centímetros de diámetro, perteneciente a la empresa canadiense Enbridge Inc, se quebró derramando el crudo en el arroyo Talmadge.
Según la empresa, el oleoducto fue cerrado al igual que las válvulas de aislamiento, deteniendo así el vertido de petróleo. Una investigación está en curso para determinar las causas de la fuga.
“Nos comprometemos a limpiar minuciosamente el sitio lo más rápido posible”, afirmó Enbridge.
La EPA indicó que estaba gestionando todos los aspectos de la limpieza de la contaminación, que se extiende a lo largo de 50 km del río Kalamazoo, en zonas pantanosas, residenciales e industriales.
“Es una marea negra importante que puede potencialmente degradar una vía de agua esencial y amenazar la salud pública”, declaró la directora de la EPA, Lisa Jackson.