«Estas nuevas protecciones serán aplicadas por un organismo de control que velará por la gente, y no por los grandes bancos, los prestamistas, o las casas de inversión. Y eso no es bueno solo para los consumidores: lo es para la economía», sostuvo el mandatario estadounidense Barack Obama, al promulgar la mayor regulación de Wall Street desde 1930.
Para difundir los efectos de la ley a los ciudadanos comunes, la Casa Blanca ha comunicado los siguientes puntos de la reforma:
1) Protecciones más fuertes a los consumidores en contra de algunas prácticas de las tarjetas de crédito como las altas tasas de interés que cobran a los morosos.
2) Los bancos no podrán cobrar comisiones por vender hipotecas de cobro dudoso.
3) Bancos y tarjetas deberán informar gratis y más seguido sobre la situación de sus clientes para que éstos pueden estar al tanto de sus cuentas.
4) No más salvatajes financiados por los contribuyentes. Si una compañía no puede seguir adelante, tendrá que liquidarse.
5) Los accionistas de una empresa deberán estar al tanto de lo que cobra el CEO de la compañía.
6) Los agentes de bolsa que ofrecen consejos de inversión deberán actuar para satisfacer los intereses de sus clientes, y no sus propios intereses financieros.
7) No se permitirá que las firmas financieras crezcan demasiado, ya que si una cayera podría arrastrar a todo el sistema financiero.
8) Habrá una agencia encargada de supervisar que los consumidores tengan las protecciones que merecen, y poner reglas claras a los bancos, las compañías de hipotecas y los prestamistas.
9) No se podrá cobrar a los comercios cargos extra por encima de los ya establecidos por trabajar con tarjetas de débito.
10) Toda la información será de acceso público en el sitio web de la Casa Blanca.