Grecia amaneció ayer prácticamente privada de información debido a una huelga de 24 horas de los medios de comunicación, que reclaman el mantenimiento de los puestos de trabajo y protestan contra los recortes salariales en el sector, muy castigado por la crisis.
La mayoría de las televisoras y radios, así como la agencia de prensa nacional Ana, no emitían boletines y las páginas de información en Internet no se actualizaban. Los periódicos tampoco salían a la venta.
La huelga tiene que ser respetada por los periodistas ya que si no lo hacen se exponen a sanciones de sus corporaciones.
En un comunicado conjunto, todos los sindicatos de la prensa señalan que se han unido a este movimiento para pedir «contratos colectivos dignos» y la protección del empleo frente a los despidos en serie, que ya suman 4.000 desde 2010.
«La huelga de hoy es el inicio. Estamos dispuestos a intensificar nuestra lucha para hacer respetar el derecho laboral y reivindicar nuevos acuerdos salariales colectivos», señala el comunicado común de los sindicatos.