El presidente de Chile, Sebastián Piñera, reiteró su intención de no abrir las puertas a la demanda boliviana de una salida al mar, al afirmar que respetará todos los tratados limítrofes firmados hace más de un siglo tras una guerra entre ambas naciones. El mandatario respondió a su homólogo Evo Morales, quien un día antes lo acusó de ignorar la historia.
“Nuestro país tiene tratados limítrofes vigentes y eso hay que respetarlo (…) Pero si ponemos en duda los tratados, ese es un camino que no queremos recorrer”, sostuvo Piñera en la Plaza de la Ciudadanía durante las actividades de la Maratón de Santiago 2011.
Por su parte, la vocera oficial del Gobierno chileno, Ena von Baer, expresó a medios de prensa que “no vamos a entrar en una escalada de declaraciones con Bolivia (…) y se inclinó por tomar cualquier decisión desde el punto de vista de la soberanía”.
El presidente Morales acusó la víspera a Piñera, de ignorar la historia por afirmar que es “imposible” dar a Bolivia una salida soberana al Pacífico. El Ejecutivo de La Paz afirmó que mantendrá “el diálogo bilateral y multilateral”.
En una entrevista con un programa de la red pública de televisión (TVN) Sebastián Piñera afirmó el viernes que “ellos (Bolivia) pretenden algo que es imposible”.
“Chile tiene un tratado de límites con Bolivia del año 1904. Ese tratado fue válidamente suscrito y está plenamente vigente, y los tratados internacionales hay que cumplirlos”, subrayó el mandatario chileno y rechazó la iniciativa de llevar el problema a tribunales u organismos internacionales,
En el pasado mes de marzo, Piñera declaró que la medida boliviana entorpece lo poco que han avanzado los países en el tema.
“Las declaraciones del presidente Morales, incluyendo su intención de acudir ante tribunales u organismo internacionales para su aspiración reivindicatoria, territorial y marítima constituyen un serio obstáculo para las relaciones de ambos países y no coinciden ni con la letra ni con el espíritu del tratado de 1904′, dijo Piñera.