La Policía Nacional, a partir de las 18:00 de este lunes, retomará la seguridad de la Asamblea Legislativa, en reemplazo de las Fuerzas Armadas, institución que mantuvo esta misión por 32 meses después de los hechos del 30 de septiembre de 2010, mientras se mantenía el estado de excepción dispuesto por el Presidente de la República, Rafael Correa.
Virgilio Hernández, integrante del Consejo Administrativo de la Legislatura, manifestó que este cambio de mando es básicamente el cumplimiento de la Ley, sin dejar de esperar una reforma para que la seguridad de las instituciones, como de la Asamblea, esté a cargo de una composición de las ramas de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.
Hasta que llegue aquella reforma la seguridad quedará a cargo la Policía. Durante el tiempo de permanencia de las Fuerzas Armadas, en la seguridad de la Asamblea Nacional, estuvieron los comandantes Zanoní García, de la FAE, Jhon Oñate y Patricio Andrade, del Ejército.
De conformidad con la Ley Orgánica de la Función Legislativa, una de las atribuciones de la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, es ejercer absoluto mando sobre la Escolta, que tendrá como misión fundamental atender la seguridad de los asambleístas, personal asesor, funcionarios, empleados, visitantes e instalaciones de la institución. Estará a órdenes exclusivas de la Presidenta de la Asamblea Nacional.
