El presidente de Ecuador, Rafael Correa, opinó sobre la negativa del gobierno sueco a la petición para que las autoridades del país europeo entrevisten a Julian Assange, fundador de la organización Wikileaks, en el Reino Unido.
El Gobierno de Ecuador había solicitado que Suecia tome las declaraciones de Assange, acusado por supuesta agresión sexual, en su sede diplomática en Londres, donde el fundador de Wikileaks se encuentra refugiado.
“No voy a anticipar criterios”, precisó el presidente Correa al ser consultado por una periodista si la decisión de Suecia podría incidir en la resolución de Ecuador sobre el pedido de asilo político planteado por Julian Assange.
No obstante, manifestó “con todo el respeto que se merece Suecia, hay cosas que serian impensables en América Latina dentro del marco jurídico sueco”.
Expuso que, por ejemplo, Suecia solicita la extradición de Assange no porque está acusado o sentenciado sino para que rinda su testimonio, o que por ser extranjero deba ir a prisión para interrogaciones.
“Son cosas inconcebibles en el marco jurídico latinoamericano, que si aquí lo hiciéramos y allá no, fuéramos los trogloditas, los cavernarios, los que atentamos y todas las cantaletas de siempre”, expresó el Mandatario.