En la provincia de Chimborazo (centro andino) 5.316 madres gestantes e infantes menores de un año son beneficiarios de los servicios y suplementos como tabletas de hierro y vitamina A para el correcto desarrollo del embarazo y crecimiento, gracias a un programa gubernamental.
Dentro de este proyecto denominado Desnutrición Cero, las madres reciben un incentivo económico por asistir a los controles prenatales.
Desde el 16 de mayo pasado, las localidades de Penipe, Pallatanga, Cumandá, Chunchi y la ciudad de Riobamba se benefician de la segunda etapa del proyecto.
Elizabeth Parra, operativa principal de Desnutrición Cero, explica que la responsabilidad de la madre es fundamental, pues si acude a los cinco controles prenatales se monitorea el estado de salud de ella y su hijo, con lo que se evita complicaciones.
En el 2011, el Ministerio de Salud Pública a través de su programa Estrategia Acción Nutrición intervino en 758 parroquias del país, en las que evaluó que la desnutrición causa problemas de crecimiento, muerte prematura y egresos hospitalarios, situaciones que pueden ser evitables con la correcta nutrición y asesoría a la mujer gestante.