El impulso definitivo para la ejecución del proyecto binacional de riego Puyango-Tumbes fue uno de los logros más destacados por los presidentes Alan García y Rafael Correa durante el IV Encuentro Presidencial y Gabinete Binacional de Ministros Ecuador-Perú que se desarrolló en Loja este martes.
Esta obra de irrigación agrícola, que permitirá habilitar 41.500 nuevas hectáreas destinadas al agro en ambas naciones y cuya ejecución tiene un costo de US$ 298,5 millones, fue calificada por el presidente García como “el monumento a la paz entre Ecuador y Perú por los siglos de los siglos”.
El proceso de selección internacional para la adjudicación de la ejecución y supervisión de la obra contó con la participación de técnicos peruanos y ecuatorianos y la ceremonia de la buena pro, realizada el pasado sábado 23, estuvo presidida por los ministros de Agricultura de Perú y Ecuador, Rafael Quevedo y Ramón Espinel, respectivamente.
El proyecto implica la construcción de la presa derivadora en Linda Chara (Ecuador), por donde pasa el río Puyango y al ingresar a territorio peruano toma el nombre de río Tumbes.
Desde esa zona, se derivarán las aguas por un trasvase hacia la presa Palmales, de donde partirán canales de conducción para habilitar 19.500 hectáreas de cultivo para el lado peruano y 22,000 hectáreas para la zona ecuatoriana.
Del total de la inversión, US$ 86 millones corresponden a las obras binacionales en zona de frontera.
La ejecución de este proyecto tendrá un enorme impacto económico y social en las localidades fronterizas de ambos pueblos, mediante el impulso de la actividad agraria y pecuaria, con miras convertir a esa zona en un polo de desarrollo agroexportador, dijo el Secretario Nacional del Agua de Ecuador, Domingo Paredes.
“El hecho de compartir fronteras nos permite utilizar los escasos recursos que tenemos de ambos lados. El recurso hídrico dejó de ser un recurso ilimitado y en este caso el beneficio es mutuo para el sistema de riego y para el abastecimiento de agua para consumo humano”, apuntó.