Salvador Quishpe, actual prefecto de Zamora Chinchipe, trabajó junto con una empresa holandesa, auspiciada por la Embajada de ese país, en la constitución del Proyecto Diálogo Intercultural Minero, en 2011, que terminó en la formación de la compañía civil Kenkuim-Kurinunka.
Según la escritura de constitución de la empresa, que está en la Notaría Primera del cantón Nangaritza, la sociedad tiene el objeto de estudiar, diseñar, elaborar, ejecutar y fiscalizar, entre otros planes y proyectos, la explotación minera en la zona de Conguime, sin descartar a El Pangui, en donde ahora está el yacimiento Mirador.
El 9 de abril de 2011, en la comunidad de Kenkuim, del cantón Paquisha, se eligió a Gilbert Rivera como presidente de la sociedad Kenkuim-Kurinunka. La elección contó con la presencia de Ramiro Cuenca, quien actuó como delegado de Quishpe. En ese acto, el funcionario, luego de dar las disculpas respectivas por la no presencia del prefecto, calificó como “un referente a esta organización a nivel nacional”.
Antes de la constitución de la compañía, Francisco Sánchez, asesor del proyecto, sugirió que se constituya una empresa mixta, entre el Gobierno Provincial y las comunidades indígenas, teniendo como socio a una entidad civil y no al Centro Shuar.
Este último grupo y la Federación Shuar de Zamora (Fepnash-ZCh) protagonizaron el proyecto. Sánchez dijo que al aceptar una compañía mixta sería favorable que la concesión saliera a nombre de este centro y “ellos como tal hicieran convenios con la compañía para la explotación, así tendríamos un comodín y parar dicha explotación cuando nosotros queramos”.
Con la compañía mixta, según Sánchez, el Centro Shuar pediría la concesión de esas tierras “para la explotación minera” y podría evaluar y no renovar el convenio “si no se reparten bien las utilidades”.
En el análisis del período “fase de preparación de febrero-mayo 2011”, que es parte de la propuesta de reorientación y prórroga del proyecto Diálogo Intercultural Minero, se seleccionaron las zonas de trabajo y las contrapartes del proyecto, que incluyó a Nuevo Quito y al cantón El Pangui.
Como una de las condiciones favorables para la ejecución del proyecto, el documento señala que el Estado ordenó una auditoría ambiental en Mirador y del Centro Shuar Conguime.
El 7 de junio de 2011, Amparo Van der Zee, coordinadora del Proyecto Intercultural Minero, dirigió una comunicación a Gerson Calva, director de Gestión Ambiental del Gobierno Provincial de Zamora, en la que incluye un informe del taller sobre mejoramiento de capacidades del Centro Shuar Kenkuim y su Empresa Comunitaria Kurinunka, respecto “a la actividad minera empresarial”.
El 24 de junio de 2011, Van der Zee envió una carta al prefecto Quishpe, en donde pide que el Gobierno Provincial tome una decisión definitiva respecto a la opción a tomar sobre la ejecución del proyecto y la necesidad de reorientar el alcance de los resultados, en donde aluden “trabas de todo tipo dentro de la gestión interna del Gobierno Provincial”.
Van der Zee señaló que no es posible avanzar mediante una administración directa “y pensamos que seguirán los retrasos y trabas si no existe un liderazgo de la Prefectura o se crea la Unidad Ejecutora en cuatro meses”.
La coordinadora explicó a Quishpe que si no encuentra un mecanismo para ejecutar el proyecto de manera eficiente y ágil será mejor cerrarlo, “una vez se cumpla con los contratos suscritos y se regresen recursos -que no se detallan- a la Embajada de Holanda”.
Este Diario intentó hablar con Quishpe, quien dirige una marcha contra la minería, pero respondió: “Si quieren publicar algo, digan que trabajan para el Presidente”.