William Hague, secretario de Asuntos Exteriores del Reino Unido, ratificó este jueves la postura británica de llevar adelante el proceso de extradición de Julian Assange, fundador de WikiLeaks, a Suecia, donde se le reclama por presuntos delitos sexuales.
«No otorgaremos un salvoconducto a Assange para que salga del Reino Unido, no hay ninguna base legal que nos obligue a ello», apuntó Hague al referirse a la concesión del asilo diplomático al periodista australiano por parte de Ecuador.
«La inmunidad existe para permitir que las embajadas lleven a cabo funciones diplomáticas adecuadas y dar refugio a supuestos delincuentes no es una de ellas y tampoco impedir el proceso legal en un país», sostuvo el representande de la diplomacia británica en rueda de prensa.
Asimismo, Hague descartó que las autoridades británicas fueran a irrumpir en la delegación ecuatoriana, donde Assange se refugia desde el 19 de junio pasado, pese a que anteriormente Londres amenazó con aplicar el Acta de Premisas Consulares y Diplomáticas de 1987, que revoca el estatus diplomático de una embajada, decisión protestada por Quito.
«No hemos hecho amenazas. De momento trabajamos en conjunto con las autoridades ecuatorianas y lo haremos de manera amigable, de modo que cualquier acción que tomemos esté en concordancia con la ley internacional», indicó el titular de Relaciones Exteriores.
Cuando le preguntaron si esta situación podría durar meses e incluso años, Hague respondió: «es posible» y llegó incluso a referirse a la posibilidad de un período de tiempo «considerable». Luego agregó que no había un «límite de tiempo» para resolver el problema.
El Canciller destacó que el caso «no estaba vinculado a las actividades de Assange a Wikileaks», sino al caso sueco. «No hay un acuerdo con Estados Unidos», insistió.
«Los británicos tienen la obligación de extraditarlo hacia Suecia», «nuestro asociado cercano en tantas áreas, y una democracia amiga en Europa», afirmó.
Para esta tarde Rodolfo Sanz, secretario ejecutivo de la ALBA, dará una rueda de prensa en Quito sobre el caso y ante el llamado de las autoridades ecuatorianas a una reunión del organismo que se produciría el fin de semana.
Mientras tanto, activistas y simpatizantes del periodista australiano se manifestaban a favor de Assange frente a la representación diplomática suramericana en Londres.