El canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, inauguró hoy la I Cumbre de la Alianza Bolivariana para las Américas (Alba) con autoridades indígenas y afrodescendientes, una cita que calificó como «histórica» y de la que dijo que «llenará de sabiduría» a las generaciones futuras.
En la ciudad ecuatoriana de Otavalo, en el centro andino del país, se reunieron alrededor de 300 cargos públicos, entre alcaldes, prefectos, parlamentarios y ministros de los países de la Alba, organismo integrado por Venezuela, Bolivia, Nicaragua, San Vicente y Las Granadinas, Antigua y Barbuda, Cuba, Dominica y Ecuador.
En su discurso inaugural, Patiño pidió a los asistentes «encender la luz para que América Latina no se pierda» y destacó que ésta supone la primera vez que Gobiernos latinoamericanos trabajan en conjunto con autoridades indígenas y afrodescendientes para mantener el «nuevo amanecer del siglo XXI» en la región.
Los delegados de los países de la Alba se reunirán hoy en cuatro mesas de trabajo para desarrollar conceptos que, según explicó Patiño, buscarán construir un proceso de «sumak kawsay» o buen vivir, combatir el racismo, respetar la naturaleza y conservar el patrimonio ancestral de los pueblos, entre otros aspectos.
La cita concluirá mañana tras una cumbre presidencial con los mandatarios de Venezuela, Hugo Chávez; Bolivia, Evo Morales y Ecuador, Rafael Correa, que suscribirán una declaración final, en la que, se establecerá la repetición anual del encuentro.
La cumbre en Otavalo, ciudad indígena representativa de Ecuador, coincide con la celebración tradicional de la fiesta del Sol o Inti Raymi, que festeja el solsticio de verano y la recogida de la cosecha.