La embajada de los Estados Unidos en Ecuador buscó un acercamiento con cuatro asambleístas de Alianza PAIS 15 días antes de la instalación de la Asamblea Constituyente de Montecristi (30 de noviembre de 2007). Así lo confirmó Rosana Alvarado, actual legisladora del bloque oficialista.
“Recibí una llamada por parte de una funcionaria de la Embajada de EE.UU., quien dijo que se llamaba Carolina. Me pidió una reunión con representantes estadounidenses en un restaurante en Quito, es decir, fuera de las instalaciones diplomáticas. Obviamente dije que no porque no era la intención de PAIS el aceptar agraditos de un gobierno que veía con malos ojos la presidencia de Rafael Correa”, contó.
Con esas declaraciones, la legisladora ratificó la información difundida por WikiLeaks y que El Telégrafo publicó el 9 de mayo, en en la que se informó que la Embajada estadounidense intentó un acercamiento infructuoso con los asambleístas constituyentes oficialistas, en vísperas de que se inicie el trabajo en Montecristi.
Alvarado acotó que no solamente ella fue “tentada” por la embajada sino otros tres asambleístas de PAIS: Betty Tola (actual Ministra de Coordinación de la Política), Jaime Abril (también legislador) y el ex constituyente Fernando Vega.
“Carolina, la funcionaria de la embajada, hablaba con bastante recelo y no nos explicaba por qué la reunión, solicitada para el 18 de noviembre (de 2007), no podía realizarse en un sitio oficial. Por eso preferimos decirle no a esa invitación. Además establecer un nexo directo con EE.UU. era inconveniente para el proyecto político aún embrionario”, agregó.
Por su parte, el asambleísta Abril manifestó que no recibió un “telefonazo” oficial por parte de la embajada de los EE.UU. “aunque sí existía un interés por parte de ese país de recomponer las relaciones con el presidente Correa, aún más cuando se advenía una Constituyente de plenos poderes”.
Alvarado comentó que ellos eran asambleístas recién electos y no podían dañar la imagen de PAIS con las potenciales consecuencias que se establecían de un encuentro informal. Así confirmó lo detallado por la Embajada de EE.UU. en el cable: “cualquier reunión con la embajada de los EE.UU. daría lugar a titulares (de prensa)”.
Por otro lado, Guillermo Lasso, ex presidente ejecutivo del Banco de Guayaquil y potencial candidato presidencial por el movimiento Creando Oportunidades (CREO), manifestó que siempre estará abierto a hablar con personas que acudan a él para escuchar una opinión sobre lo que sucede en el país, en un momento dado, en relación a la revelación de los cables WikiLeaks en torno a un encuentro entre él y la ex embajadora de EE.UU. Linda Jewell.
Lasso, en una entrevista a El Universo, indicó que no intentó un plan desestabilizador en contra del actual régimen. “Es muy hábil cuando determinadas personas quieren utilizar ciertos hechos para deformar la realidad”, criticó.
Sin embargo, los despachos informaron que líderes de las cámaras de la producción y empresarios, entre quienes se encontraba Lasso, mantuvieron extensas reuniones con la representación estadounidense para intercambiar opiniones sobre las acciones que la oposición diseñaría para bloquear el triunfo del gobierno en la consulta popular de 2007.
Torres ratifica información filtrada por los WikiLeaks
“En lo de los WikiLeaks hay parte de verdad y parte de apreciación personal de aquellos que redactaron el entorno en que escribieron esos mensajes enviados por sus supuestos jefes”, expresó Luis Fernando Torres, ex diputado del derechista Partido Social Cristiano (PSC), en una entrevista dada a Ecuadorinmediato.
En lo referente a su vínculo con funcionarios y representantes de la embajada de los EE.UU., Torres indicó que mantuvo y mantiene buenas relaciones con diplomáticos de ese gobierno. “Era natural que tuviera contactos con políticos estadounidenses, de hecho, presidía la Comisión Parlamentaria Estadounidense-Ecuatoriana con otros legisladores. Y presidía otras comisiones más donde se analizaba el impacto del Tratado de Libre Comercio”, agregó.