Dentro de la V Cumbre de Poderes Judiciales de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), que se realiza en Cuenca, las delegaciones de los países asistentes se instalaron en tres mesas de trabajo, con el propósito de discutir los temas planteados en la agenda.
El grupo 1 trabaja sobre la situación actual de la jurisprudencia en América Latina, el 2 sobre la importancia de la profesionalización de los abogados, mientras que el 3 analiza la independencia de los servidores judiciales.
Durante la inauguración de la cita, el Presidente Rafael Correa había indicado que “un juez inicuo es peor que un verdugo. …. Ustedes (representantes del sistema de justicia) son los responsables de que la ley no solo sean escritos para las altas autoridades, sino que se vuelvan carne y sangre del día a día”, señaló el Jefe de Estado ante el auditorio ocupado por funcionarios judiciales de todo el país y de las delegaciones internacionales.
Correa reconoció que los países suramericanos comparten problemas endémicos por la falta de eficiencia y eficacia en los procesos judiciales burocráticos que generan conflictos legales, impunidad, abusos y discriminación.
Para mejorar este panorama, el Primer Mandatario propuso la creación del Consejo de Justicia de la Unasur.